Por: Arlenys Tabare.

De acuerdo con un informe publicado por JAMA Health Forum, el precio de la bebidas azucaradas en Estados Unidos se dispararon el año pasado debido a los altos impuestos provocando una disminución en las ventas de estos productos.

Según el análisis, las entidades en donde los precios aumentaron fueron Boulder, Colorado; Filadelfia, Pensilvania; Oakland, California; San Francisco, California; y Seattle, Washington, donde las ventas se desplomaron más de un tercio. Aunque los especialistas consideran que esta es una estrategia para evitar que los estadounidenses sigan consumiendo azúcar.

Se calcula que los impuestos aplicados a estas bebidas están entre 1 y 2 centavos por onza, lo que se traduce en $1.36 dólares adicionales en impuestos al precio para una botella de 2 litros.

Al respecto, los investigadores señalan que “los impuestos especiales a las bebidas azucaradas se asociaron con caídas grandes y consistentes en las compras de bebidas azucaradas en cinco ciudades estadounidenses gravadas luego de cambios de precios impulsados por los impuestos”, dice el estudio.

Los autores de esta investigación apuntaron que con el aumento de los precios de estos productos de un 15 a 20% sí se genera una disminución en su consumo, lo que es igual a importantes beneficios para la salud teniendo en cuenta que Estados Unidos tiene una de las tasas de obesidad más grandes del mundo.

Por otra parte, la industria de bebidas señala que estas acciones son “discriminatorias” indicando que los altos impuestos solo limitan las opciones y la capacidad del cliente de elegir lo que quiere consumir; sin embargo, muchas empresas han incentivado a ofrecer productos más saludables con bajos contenidos de azúcar y aditivos.

Finalmente, los investigadores mencionaron que “este estudio estimó un aumento del 33.1% en el precio y una correspondiente disminución del 33.0% en el volumen, lo que sugiere beneficios para la salud al menos tan sustanciales como los encontrados anteriormente“, destacaron.