Dos meses antes de oficializar su precandidatura, Esteban Grassano planteó un proyecto que además de polémico, no dejó de resultar novedoso: el uso de drones para combatir la inseguridad. Luego de idas y vueltas con el massismo, Grassano decidió presentarte como postulante a la intendencia por el movimiento local Acción Piramarense. Su plan, que continúa vigente, ya recibió duros cuestionamientos.

Según explicó el precandidato vecinalista, la idea de su equipo “es hacer una barrera electrónica a través de una red de drones que trabajan automáticamente con GPS puestos en los móviles policiales”. De acuerdo a Grassano, la intención es poner en funcionamiento “cuatro drones, uno por cada localidad del distrito” (Pinamar, Ostende, Valeria del Mar y Cariló).

“Con un sistema de alarmas, entre 7 y 14 minutos el dron estaría encima del ilícito y las capacidades de la policía aumentarían muchísimo. Ese es el tiempo que tardaría un móvil policial para llegar a un eventual lugar de disparo. El dron se activaría desde una central cuando suene la alarma instalada en la casa de un vecino o por un llamado desde su teléfono. Alcanza perfectamente con el grado de autonomía. De noche incluso tienen cámaras infrarrojas” valorizó el dirigente en diálogo con radio FM 102.3.

Por su lado, el precandidato de la UCR, Lucas Ventoso, no anduvo con vueltas al momento de analizar la propuesta: “Cuando este terma de la inseguridad se pretende solucionar rápidamente con un discurso o una receta de dos minutos, no existe. Cualquier político que te hable de la seguridad y te cite, por ejemplo, este tema de los drones: se convierte en una tomada de pelo”.

En esa línea, Ventoso, en conversacion con 0223, amplió: “Soy un abogado dedicado al derecho penal. Conozco la realidad del sistema judicial, penal y de la seguridad. Lo que sucede en nuestro país, en mayor o menor medida según la región, es que está absolutamente colapsado el sistema en cuanto a la seguridad pública. La policía no tiene capacitación suficiente, no tiene cursos de entrenamiento, tiene un sueldo paupérrimo que ronda los 6.000 pesos. Eso tampoco va a mejorar con la futura policía comunal.Trabajan en turnos laborales del siglo pasado, con 48 horas de corrido. No tienen patrulleros, las comisarías están en deplorables condiciones. Los expedientes se llevan a dedo, hubo policías parados en la ruta, con 20 expedientes bajo el brazo, haciendo dedo para trasladarlos hasta Dolores. En ese contexto, que venga un político a decir que la inseguridad se soluciona con la compra de unos drones, es una falta de respeto para la policía que trabajaba en esas condiciones y para toda la comunidad. Te lo defino como tétrico” concluyó.