Intendentes y dirigentes de líneas internas propician a la dupla Omar Félix-Roberto Righi y negocian más respaldos. Predomina la idea de lista única y de endurecer el rol opositor.
A diez días de la fecha inicial de presentación de listas, el Partido Justicialista de Mendoza intenta ordenarse en torno a una lista común que contenga el núcleo de un presidente partidario, un vice y tres referentes de líneas internas. Y por debajo de ellos se reparan las 49 secretarías de la conducción provincial.
La propuesta surgió de los cinco intendentes del PJ (en distintos grados) y se viene tanteando la aceptación de los nombres del ex diputado nacional Omar Félix (Integración) y el actual jefe comunal de Lavalle, Roberto Righi (Azul) para encabezar la nómina.
Se trata de dos dirigentes que alcanzaron victorias electorales en sus departamentos en medio de la debacle en cuotas que significaron para el FpV los comicios desdoblados de 2015.
Además de Righi, el PJ encabeza los municipios de Maipú (Alejandro Bermejo); San Martín (Jorge Omar Giménez), Tunuyán (Martín Aveiro) y San Rafael (Emir Félix).
La propuesta de los dos referentes ha alcanzado apoyos en una parte del sector Azul y en la Línea Integración y cuenta con el beneplácito del Frente de Agrupaciones Peronistas, el sector en el que se recicló y amplió La Corriente, en su momento mayoritariamente ciurquista.
Para hoy están “pronosticadas” nuevas reuniones entre intendentes y dirigentes de agrupaciones internas.
El entendimiento no encuentra -sin embargo- acompañamientos en una porción Azul, vinculada fundamentalmente a la presidenta del bloque del FPV en Diputados, Patricia Fadel.
Y aguarda el pronunciamiento del sector kirchnerista cuyos negociadores -el diputado nacional Alejandro Abraham y la senadora nacional Anabel Fernández Sagasti- hasta el momento se han mantenido en silencio.
En medio de la negociación partidaria en el otrora poderoso sector Azul se escuchan los ruidos de los distanciamientos en Tunuyán (Aveiro-Fadel) y de la falta de coincidencias en Maipú (Alejandro-Adolfo Bermejo).
Todo indica que habría quedado descartada una propuesta anterior que contemplaba la elección en común de una figura partidaria de renombre (se habló de Juan Marchena, Roberto Roitman, María Inés Abrile de Vollmer) para transformarla en un presidente partidario ubicado por encima de los sectores.
“Algo así significaría el fracaso de la generación actual del PJ que terminaría admitiendo no saber arreglar los problemas de su tiempo al tener que apelar a una generación anterior”, dispararon contra la propuesta, partidarios de elegir una conducción “actual”.
Nadie descarta nada “hasta el cierre de las listas” el próximo miércoles 29 de setiembre “a la hora 24”. Pero desde todos los sectores se propicia que se evite las internas partidarias y se inclinan por una nómina de unidad.
Los propios Félix y Righi no dan por “concluido” el tema y todos dicen estar abiertos a “mejorar las propuestas”.
Una segunda coincidencia en el peronismo mendocino es la de propiciar que el recambio de autoridades venga acompañado de una nueva etapa en la relación con el gobierno provincial de Alfredo Cornejo, en la que se fortalezca el rol opositor.
“Ya le aprobamos un margen de financiamiento como nunca en la historia de Mendoza. Ahora habrá que ver el presupuesto del año que viene y en qué se empleó el crédito autorizado para este año”, repiten en los sectores internos del PJ. Y ponen foco en las elecciones legislativas del próximo año.
La definición del nombre que terminará encabezando la lista de diputados nacionales el año entrante será un motivo adicional de fricciones en el PJ.
Es que ya circulan los primeros nombres detrás de una banca en el Congreso.
Al de Omar Félix se suman los de Righi, Eduardo Bauzá y Alejandro Bermejo.
No obstante su definición será posterior a la de los nombres de las autoridades partidarias. Y nadie excluye la posibilidad de que haya repeticiones en ambos lados.
En medio de una doble carencia de liderazgo local y nacional, el PJ mendocino intenta poner fin a su estado deliberativo. El pasado 8 de julio la mesa ejecutiva que conduce el ex vicegobernador, Carlos Ciurca fijó el 6 de noviembre la fecha de elecciones de autoridades partidarias.
La decisión fue adoptada junto a Alejandro Bermejo (Maipú), Emir Félix (San Rafael) y la senadora nacional Fernández Sagasti.
El cronograma electoral establece que el 29 de setiembre se producirá el cierre de presentación de listas. Y se espera la convocatoria a un congreso para modificar la Carta Orgánica.
Internas departamentales
El acuerdo interno que intenta el PJ sólo abarca el ámbito provincial. Ya que, al menos en doce departamentos se espera que las autoridades se definan en internas de agrupaciones provinciales y locales.
La lista única es probable -no segura- en Maipú, San Martín, Lavalle, Tunuyán y San Rafael, donde gobierna el peronismo. Pero en Malargüe se espera otro choque entre el jaquismo y la agrupación de los Félix. En Santa Rosa (con internas seguras para definir candidato a intendente) se negocia una lista de unidad partidaria para “recuperar” el departamento.
En tanto en Las Heras, Capital, Guaymallén, Luján, San Carlos, Junín, La Paz, Tupungato y General Alvear (en manos de la UCR, el Pro o el Frente Renovador) se descuenta que habrá más de una lista. En el PJ los congresales provinciales se definen en las elecciones municipales, junto con la conducción departamental.
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