"Fue un partido dramático, pasaron muchas cosas en casi cinco horas. Ahora me siento triste, pero en un par de días sabré ver lo grande que fue el partido. Al menos ahora sé que puedo ponérselo difícil a los mejores del mundo", afirmó el argentino en una rueda de prensa a la que le costó llegar debido al cansancio.

"Me costó venir aquí a hablar, no podía", dijo el argentino, que deseó que Djokovic pueda recuperarse a tiempo del esfuerzo de hoy para disputar la final el domingo.

Del Potro subrayó que espera "todo lo mejor para Nole: es un buen tipo, un buen amigo", resaltó.

Ante el primer tenista del ránking, el argentino se quedó hoy a un paso de entrar en su segunda final de un Grand Slam tras la del Abierto de Estados Unidos que conquistó en 2009, y salió de la pista central del All England Club ovacionado por unas gradas puestas en pie.

"He perdido", les recordó Del Potro en la sala de prensa a los periodistas internacionales, que insistían en felicitarle por el juego que desplegó ante Djokovic.

"Realmente fue un partido de alto nivel. Creo que fue bonito para verlo, pero claro, yo estoy triste", apuntó el octavo cabeza de serie en Wimbledon, que agradeció el apoyo que le brindó hoy el público británico.

El argentino resaltó la ayuda que supuso el calor de la grada: "Cuando iba por detrás en algún momento me aplaudían. No les importa si yo soy el ocho y el otro el uno, simplemente les gusta el tenis, disfrutaron, y me ayudaron a luchar durante todo el partido", indicó.