Luis Galiotti será quien ocupe el lugar del renunciante Carlos Ferrer. También sufrieron bajas de candidatos legislativos
“El Congreso de mi partido se reunió, decidió que yo fuera el precandidato y yo acepté”. Así resumió ayer Luis Galiotti su flamante lanzamiento como precandidato a gobernador por el partido Es Posible. El abogado era, hasta el sábado, el presidente de ese espacio político, pero tras la escandalosa salida del ex precandidato Carlos Ferrer, se transformó en la nueva apuesta del partido de Rodríguez Saá en el intento de suceder a Paco Pérez.
A la forzada renuncia de Carlos Ferrer, luego de que su hija Sofía lo acusara en las redes sociales de “homofóbico, maltratador, corrupto y golpeador”, se sumó una catarata de renuncias de precandidatos a legisladores de varios distritos, en algunos casos motivados por la falta de financiamiento para la campaña.
“Si bien el golpe fue fuerte, hemos conseguido remplazar a quienes renunciaron, en muchos casos, con los suplentes y en otros con independientes que se sumaron a esta fuerza”, admitió Galiotti, quien recalcó que el discutido financiamiento de su campaña se hará “poniéndole el hombro a lo que haga falta”.
El precandidato de la fuerza que a nivel nacional lidera el puntano Adolfo Rodríguez Saá, destacó que en su plan de gobierno tiene como prioridades “el pleno empleo, mejorar la deuda habitacional, brindar mayor seguridad en los pasos fronterizos y retomar la discusión de la minería. ¿Si en otras partes se hace minería limpia, por qué acá no se puede hacer?”, se pregunta Galiotti.
Comentá la nota