El operador kirchnerista Roberto Porcaro fue imputado a fines de diciembre pasado por “cohecho y tráfico de influencias” por el Juzgado Federal Nº 1 de Necochea, a cargo del doctor Bernardo Bibel. La causa produjo días atrás un allanamiento sobre una casa propiedad de Porcaro en la que se encontraron 400 mil dólares en efectivo.
Consultado sobre la situación de la causa, el ex concejal radical, Alberto Esnaola, se refirió a un "nuevo impulso" que ha tomado la misma. "Las novedades que han surgido ahora son sin duda alguna el avance que creo que tiene que ver con el fiscal de Mar del Plata, que le ha dado un nuevo impulso a la investigación atento que hace más de 5 años que obviamente la causa ha tenido muy poco movimiento aunque sí se han citado a indagatorias", señaló en diálogo con Cuatro Vientos.
Esnaola fue el principal denunciante de una presunta operación turbia en la que Roberto Porcaro habría cobrado un millón de dólares por gestiones "debajo de la mesa" para otorgar la concesión de Sitio 0 en Puerto Quequén. Esa denuncia lo llevó incluso a prestar declaración frente al fiscal José María Campagnoli en 2016.
"Lo que las informaciones periodísticas dicen, no me consta en lo personal, es que hay una investigación que es más amplia que el cohecho en sí, que es el origen de la denuncia que hace Campagnoli sobre el trabajo realizado desde el bloque de concejales en su momento junto a Gonzalo Diez en el año 2012", indicó Esnaola. "Ahí hay una cuestión que hace a la defraudación del Estado y a la poca transparencia y en el no cumplimiento de la reglamentación existente en el COnsorciod e Gestión de Puerto Quequén para una inversión de esa naturaleza", aclaró.
El ex concejal radical señaló el retraso que tiene la causa. "Veremos cuál es el cariz de las indagatorias para el mes de febrero y cuál es el eventual planteo que pueda hacer el fiscal respecto de la línea de investigación, pero para nosotros no es novedad que aparezca esto ahora: debió haber pasado ya hace mucho tiempo atrás", sostuvo y agregó que "lo celebramos y esperamos que la Justicia vaya a fondo para esclarecer responsabilidades que en definitiva el único que puede atribuirlas es la propia Justicia".
"Nosotros tenemos claro cómo fue el objeto del negocio, lo dijimos en su momento, tenemos claro cuáles fueron las violaciones que se hicieron a las reglamentaciones administrativas vigentes y por eso lo denunciamos al Tribunal de Cuentas, que evidentemente no ha tenido una vocación para investigar pero ahora es un tema que deberá dilucidar la Justicia", resaltó.
Esnaola no ocultó su "satisfacción personal de ver que ahora toma un cariz algo que para nosotros ya era mucho más grave de antes pero esperemos que la justicia llegue hasta el fondo y vaya hasta el hueso".
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