El gobernador ayer estuvo con Sergio Massa, pero no pasó por Casa Rosada. La visita se produce mientras se aleja la posibilidad de un encuentro del Presidente con su vice
Por Eduardo Menegazzi
Del mismo modo en que ya lo hizo con los gobernadores peronistas que resultaron recientemente reelectos, tanto en La Rioja como en La Pampa, el presidente Alberto Fernández viajó este mediodía a la provincia de Salta. Allí compartirá escenario con el mandatario local Gustavo Sáenz, quien el domingo fue ratificado en la urnas con un contundente apoyo para que renueve su gestión por un nuevo periodo. Sáenz, quien conformó un frente multisectorial y es muy cercano al ministro de Economía, Sergio Massa, logró el 47,29% de los sufragios en las elecciones anticipadas de su distrito y le sacó una amplia diferencia de casi 30 puntos a la oposición de Juntos por el Cambio.
Fernández intentará capitalizar esta victoria de Sáenz como ocurrió con las del riojano Ricardo Quintela y el pampeano Sergio Ziliotto. Este miércoles, en su despacho de la Casa Rosada recibió a otro de los ganadores oficialistas en la jornada del domingo, el fueguino Gustavo Melella. Se había planeado un viaje a ese territorio pero finalmente quedó postergado. Su viaje se da en medio de la indefinición y de los cruces de opiniones dentro del Frente de Todos para definir la estrategia electoral y quiénes serán los candidatos del espacio en 2023.
El Presidente había visitado la provincia norteña el 3 de marzo de este año cuando en la ciudad de La Poma, a casi 4.000 metros de altura, hizo entrega de la vivienda número 90 mil de su gestión de gobierno también en compañía del gobernador. Ahora lo hará con los ministros de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis, y el de Hábitat y Desarrollo Territorial, Santiago Maggiotti. Recorrerán la Obra de Optimización y Ampliación de la Planta Depuradora Sur y participará de un acto donde se anunciarán nuevas obras para la provincia, en Salta capital.
Sáenz visitó a Massa ayer por la tarde en el Ministerio de Economía en una muestra de la sintonía que existe entre ambos. Cultivan una amistad profunda y en 2015 fueron compañeros de fórmula con la boleta del Frente Renovador. Con el Presidente, el gobernador mantiene una estrategia pendular: a veces muestra cercanía y en otras una prudente distancia con la gestión a nivel nacional. Luego de su éxito eleccionario, Fernández lo felicitó mediante un tuit. “Felicitaciones Gustavo Sáenz por la victoria en estas elecciones, el pueblo salteño ha vuelto a confiar en todo lo que hiciste durante este tiempo defendiendo los intereses de la provincia. Seguiremos trabajando unidos como hasta ahora y con las mismas convicciones”, escribió.
También otros potenciales candidatos frentetodistas como el ministro del Interior, Eduardo de Pedro, saludaron a Sáenz por su victoria, además de Massa y el Presidente. Y hasta recibió un saludo del jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
Dentro del Frente de Todos se aguardan con expectativa las declaraciones de Cristina Kirchner quien esta noche desde las 21.30 dará un reportaje en un canal de televisión. Ayer, en Tecnópolis, Alberto Fernández defendió la negociación que el gobierno a través de su ministro de Economía lleva adelante con el Fondo Monetario Internacional después de las críticas que CFK hiciera un día antes. Allí había vuelto a decir que no será candidata en las elecciones de este año.
El jefe de Estado no tiene intenciones de profundizar sus diferencias con Cristina. Se lo dijo a un grupo de intendentes que el miércoles estuvieron en su despacho. En ese marco se produjo también la cancelación de la habitual conferencia de los jueves que realiza la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti para no escalar en el intercambio de posiciones con el kirchnerismo.
La ex presidenta adelantó que participará y será la principal oradora del acto que se hará dentro de una semana en la Plaza de Mayo, el día en el que se cumplirán dos décadas de la asunción de Néstor Kirchner como presidente en 2003, y lanzó así una fuerte señal de que buscará posicionarse en el centro del armado de la estrategia electoral del Frente de Todos de cara al cierre de listas para las PASO.
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