El Frente Renovador es el partido que puede tirar para uno u otro lado las elecciones del próximo año. Sin embargo, Sergio Massa sabe que el FR en soledad no tiene la fuerza suficiente para salir primero, y que mantenerse a flote sin pararse de manera definitiva en una vereda resulta complicado. Por eso, lo que el tigrense menos quiere es que se disipe su fuerza. Así como ocurrió en 2015, Massa ahora pide a sus filas que se unan para presentar una sola lista por sección electoral.
Siendo, además, que el FR tomó distancia del macrismo a raíz del proyecto de Ganancias, tironeado por los sectores que han visto sus intereses seriamente afectados por las políticas del gobierno, Massa necesita mostrar solidez, antes de que alguno de sus alfiles prefiera irse con otra de las corrientes, ya sea peronista u oficialista, en caso de que todo se desmadre.
El caso de Sergio Massa cuenta con la particularidad de que su espacio es un actor fundamental del escenario nacional, pero ostenta poco más de una docena de intendentes bonaerenses y no tiene ni un representante en el Senado. En el 2017, el ex titular de ANSES deberá demostrar que está a la altura de las circunstancias y mostrar a su tropa, no sólo de manera cuantitativa sino también cualitativa, y para eso la necesita disciplinada.
¿UNIDAD EN LA PLATA?
En el 2015, Massa pidió unidad en los distritos y, por ende, en La Plata. Sin embargo, agosto llegó con cinco listas por el Frente Renovador con distintos candidatos a intendente, encabezadas por José Ramón Arteaga, Marcelo “Chuby” Leguizamón, Carlos Melzi, Oscar Vaudagna y Javier Pacharotti. De cara a las legislativas de 2017, Massa no quiere repetir esa experiencia ni mucho menos soportar la batalla campal que fueron las legislativas 2013 para la octava sección electoral. Sin embargo, aún predicando la bandera de unidad, el massismo platense está partido.
Llamativamente, el lunes 12 se llevó a cabo la cena de fin de año del sector de Raúl Pérez, aún cuando para ese mismo día estaba programado un brindis del sector de Juan Amondarain. Otrora socios, siempre jugando en tándem, lo cierto es que los massistas que responden a las directivas del “Vasco” no asistieron a la cena de Pérez para más de setecientas personas, a la que sí fueron Virginia Rodríguez (de Encuentro Renovador), “Tachu” Malpeli y Hugo Mársico (concejales con mandato cumplido), el concejal Oscar Vaudagna, Elisa Schuster (de Mujeres por el Cambio) Juan Bautista Díaz (de Jóvenes por la Renovación), Azul Villanueva (de Generación Renovar), Luis Franco (secretario adjunto del Sindicato de Salud), Carlos Rostino (secretario general del Sindicato de Comercio La Plata), Juan Pedro Chaves (del Centro de Estudios y Planificación de Políticas Públicas), entre otros dirigentes. Quien sí fue invitado fue Carlos Melzi, quien no se presentó en la cena.
Lo llamativo, o mejor dicho contradictorio, es que Pérez dijo en la cena: “Si volvemos a ir con cinco listas, no vamos a poder lograr mejorar la calidad de vida de los platenses”.
TRES ESPACIOS
No es novedad que haya, al menos, dos espacios definidos: el de Melzi y el de Amondarain. Melzi, reagrupando a su tropa, se prepara para disputar el Frente Renovador, mientras Raúl Pérez se define como otra opción. Massa deberá apostar a la cintura de cada alfil para lograr la ansiada unidad, en un contexto en donde unidad es la palabra de moda, pero pocos la practican.
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