Por: Pablo Penedo.

No habrá huelga en el servicio de limpieza y recogida de basura de Vilagarcía en plenas Festas de San Roque. La ciudadanía en general, pero sobre todo, la hostelería y el comercio de la capital arousana, lanzaban este jueves un profundo suspiro de alivio al conocer que la mayoría de la plantilla local de Urbaser acordaba en asamblea dar su visto bueno al modesto acuerdo que la compañía internacional se prestó a ofrecer in extremis a sus representantes sindicales. Y ello, tras nueve horas y media de intensas y maratonianas negociaciones entre las cinco y media de la tarde del miércoles y la una de la madrugada del jueves, retomadas a las diez de la mañana para concluir dos horas más tarde ya con la huelga en marcha desde las once de la noche del miércoles, si bien en suspenso en espera de la votación.

Ni el 15 % de subida salarial escalonada entre el 2023 y el 2025 que pedían en primer término los representantes de los asalariados, ni el 11 % al que estaban dispuestos a bajar ya este pasado lunes. Finalmente, por mayoría, si bien también con al menos una docena de trabajadores en desacuerdo, los asistentes a la decisiva asamblea, celebrada a media tarde en la nave de Urbaser en el polígono de Trabanca Badiña, aceptaron una paga única y no consolidable de entre 1.000 y 1.500 euros este año y una subida del 1,5 % de sus sueldos en el 2024. Para el 2025, el compromiso de la concesionaria del servicio municipal de limpieza y recogida de basura es la de entregar el 61,61 % del total del incremento de sus retribuciones que le conceda entonces el Concello de Vilagarcía en virtud de la primera revisión del contrato de ocho años que entró en vigor la pasada primavera. Un porcentaje que, explican fuentes sindicales, se debería traducir en alrededor de un 2,5 % de subida del importe de sus nóminas.

Al igual que en el capítulo económico, los trabajadores deberán esperar a otra ocasión para conseguir disponer de dos fines de semana completos libres al mes como pedían. Urbaser solo se avino a aceptar que disfruten de uno.

De lo lejos que queda lo que firmarán de lo que pretendían de partida los operarios de la limpieza da fe el propio presidente del comité de empresa que defendió los intereses de la plantilla ante Urbaser, Juan Carlos Pomares: «Non é un grande acordo, pero é que non puidemos rascar moito máis. É mellor un mal acordo que un bo pleito. Esperemos facelo no 2025», apunta en referencia al año en el que el comité de empresa podrá plantear a Urbaser, ya sin ninguna cortapisa administrativa en los pliegos de su concesión pública, una revisión a fondo de su convenio colectivo.

Más allá de las dos partes en conflicto, Juan Carlos Pomares defiende que los trabajadores han tenido también bien presente a Vilagarcía a la hora de votar mayoritariamente sí al acuerdo de mínimos propuesto por Urbaser: «O noso é un servizo esencial e sería unha faena para o comercio e para a hostalería unha folga agora. Iso tamén o valoramos».

El alcalde de Vilagarcía se felicita por la noticia y recuerda la mediación de Ravella

El alcalde de Vilagarcía, el socialista Alberto Varela, convocó de urgencia a la prensa para valorar, poco después de la una de la tarde y a falta de la decisiva asamblea de trabajadores escasas horas después, el «preacordo» entre las dos partes en conflicto, de cuyo contenido había sido plenamente informado. El regidor declaró que «estamos moi satisfeitos» por que se evite una huelga que «xa dixemos que sería unha pésima noticia para a nosa cidade, pero tamén para a imaxe da empresa e para os traballadores».

Varela agradeció a empresa y comité «que se moveran» para poder alcanzar su entente, al tiempo que destacó la «longa labor de mediación» por parte del gobierno local que encabeza, en el que, dice, «sabiamos que debiamos ser activos» de cara a la resolución del problema.