Neuquén fue la quinta derrota del año. El arrastre de Macri debilitó la estructura del radicalismo, que retendría Mendoza pero la tiene difícil en Viedma y Río Gallegos.
El desplome de Mauricio Macri arrastró a la UCR y lo golpeó donde más le duele: el poder territorial. El radicalismo perdió este domingo en Neuquén la quinta capital provincial del año, la mitad de las que controlaba antes del arranque del cronograma electoral y que significaban buena parte de su capital político.
La derrota de este domingo a manos del MPN fue significativa porque el radicalismo gobernaba Neuquén desde hace 20 años. El saliente intendente Horacio "Pechi" Quiroga construyó una fortaleza electoral y había logrado sobrevivir a algunos vaivenes políticos como su alianza con el kirchnerismo.
Pero en esta elección Quiroga, un ajedrecista de la política, se abrazó al macrismo y no supo ver el cambio de clima nacional. El radical le cedió la candidatura a Marcelo Bermúdez, con origen en el PRO, a pesar de las críticas y el enojo de buena parte del "quiroguismo" puro. El Pechi no sólo perdió su ciudad: en octubre la tendrá difícil para conseguir una banca en el Senado ante un MPN envalentonado.
El MPN le ganó al PRO y recuperó la intendencia de la capital después de 20 años
Neuquén se suma así a Santa Rosa, Córdoba, Paraná y Santa Fe, las otras capitales provinciales que el radicalismo resignó este año, arrastrado en parte por la caída electoral del gobierno nacional en los grandes centros urbanos, que en 2015 fueron el principal sostén del triunfo de Macri.
El declive también se vio en Rosario y otras ciudades importantes como Mar del Plata y La Plata, otra capital que Cambiemos pondrá en riesgo en las próximas semanas, aunque en este caso gobernada por un macrista puro, Julio Garro.
En lo que va del calendario electoral el radicalismo sólo pudo retener una capital: San Salvador de Jujuy. Allí Raúl "Chuli" Jorge consiguió una cómoda reelección con el 46 por ciento de los votos.
Rodolfo Suárez
Todo indica que el próximo domingo la UCR festejará en la Ciudad de Mendoza, a esta altura su principal activo territorial por fuera de las tres gobernaciones. Ulpiano "Yayo" Suarez, actual Subsecretario de Gestión Pública y Modernización del Estado, es el favorito tras un cómodo triunfo en las PASO.
La principal preocupación del radicalismo es un batacazo del peronismo a nivel provincial, donde Alfredo Cornejo se la juega con Rodolfo "Rody" Suárez, el actual intendente de la capital. Un triunfo de "Yayo" Suárez no aparece amenazado como algunas encuestas muestran en el caso de su tío Rodolfo, que por las dudas este lunes aclaró: "no soy el candidato de la Casa Rosada ni de Cambiemos".
El problema para el radicalismo viene en las semanas posteriores. El centenario partido pondrá en juego otras dos capitales provinciales, Viedma y Río Gallegos, con riesgo concreto de perder las dos.
Neuquén se suma así a Santa Rosa, Córdoba, Paraná y Santa Fe, las otras capitales provinciales que el radicalismo resignó este año, arrastrado en parte por la caída electoral del gobierno nacional en los grandes centros urbanos
En la capital rionegrina, que la UCR gobierna desde 2003, el favorito en la elección del próximo 6 de octubre es el vicegobernador Pedro Pesatti. El candidato de Juntos Somos Río Negro, el partido de Alberto Weretilneck, quiere aprovechar la "ola verde" de triunfos de esa fuerza, que ya retuvo la gobernación, Bariloche y le arrebató Cipolletti al PRO, entre otros triunfos municipales.
"Me siento muy lejos del macrismo, gracias a Dios", aclaró días atrás Pesatti para diferenciarse del apoyo que Weretilneck expresó a Macri antes de las PASO. El vicegobernador también aparece beneficiado por la crisis de liderazgo en el radicalismo, afectado por el reciente fallecimiento del intendente José Luis Foulkes. La UCR, además, no tiene el apoyo del gobierno nacional que acordó no complicar a Weretilneck.
En el caso de Río Gallegos, el intendente Roberto Giubetich no irá por la reelección tras una compleja gestión, afectada por la severa crisis económica de la provincia que repercutió fuerte en la ciudad. Con ley de lemas, el radicalismo presentará cinco candidatos para tratar de retener la capital de Santa Cruz el próximo 27 de octubre.
Una muestra del panorama complejo que enfrenta el radicalismo se dio en las elecciones de agosto, cuando Alicia Kirchner retuvo la gobernación. Ese día el Frente de Todos sumó el 48 por ciento en Río Gallegos, un terreno reacio para el kirchnerismo. Los lemas de Cambiemos quedaron a diez puntos.
Con este panorama, el radicalimo podría terminar el año con tres de diez capitales provinciales: San Salvador, Mendoza y Corrientes, donde este año no hubo elecciones y se renueva el gobierno en 2021. En el mejor de los casos, llegará a cinco.
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