Tras casi cuatro meses de demoras, Gabriel Felizia es el nuevo titular del Consorcio Portuario Regional Mar del Plata, en reemplazo de Martín Merlini. “Necesitamos generar más empleo”, fue su primera declaración de principios tras asumir formalmente, el viernes 24 de abril.

Felizia tiene 62 años, es de cuna alfonsinista y se recibió de hidrotécnico en la Universidad Nacional del Litoral. En los inicios de los 2000 arribó a Mar del Plata por trabajo, y a partir del 2015 se acercó al kirchnerismo. Esto lo llevó a ser en el Concejo Deliberante secretario de bloque del Frente de Todos, espacio que tiene a Fernanda Raverta como cabeza política; allí se desempeñó desde 2017 hasta su reciente nombramiento en el puerto.

En diálogo con La Tecla Mar del Plata, el funcionario elabora un diagnóstico sobre la situación del sector y los principales desafíos de su gestión de cara al futuro.

-¿Con qué situación se encontró en el puerto?

-Lo encontré parado, no operativo. Hubo un problema de dos casos de coronavirus en dos buques diferentes: uno que estaba amarrado y otro que había salido a navegar. Y eso estaba generando una tensión muy fuerte en todo el resto, que necesitaba que hubiera controles. Hay un protocolo que se modificó dos o tres veces para que a todos los que entraran al puerto se les hicieran los chequeos necesarios. Se nota la tensión por la pandemia.

-El Puerto de Mar del Plata se caracteriza por ser pesquero. ¿Está la idea de diversificar?

-Hay que ir a un puerto multipropósito, multimodal, siempre respetando el tema de la pesca. Necesitamos que la pesca funcione al ciento por ciento, que todos los barcos estén llenos y vengan a pescar, que haya una gran capacidad de producción; porque así hay más chances de generar empleo y exportaciones.

-El plan de desguace brilló por su ausencia durante la gestión de Merlini. ¿Se prevé alguna medida al respecto?

-Eso es un problema serio, ambiental y de operación. Hay 52 barcos inactivos que ocupan un montón de espacio. Son chatarra.

-El dragado es un tema muy complejo, en lo que se han gastado millones y millones sin encontrar una solución de fondo. ¿Qué solución hay?

-Hay que tener una planificación estratégica sobre ese tema, de muchos años. Hay que pensar un puerto para 30 años, no para 4 o 5. Si los modelos de negocio son para 5 años, estamos fritos todos. La pandemia va a cambiar las reglas, y lo va a hacer más rápido de lo que podemos interactuar con la operatoria del puerto. Tenemos que tener la mirada estratégica del mundo.

-¿De qué manera afecta la pandemia al puerto?

-Algunas cosas del control van a quedar después del coronavirus, como el tema de los ingresos. Va a haber una mirada de que la pandemia modificó algunas reglas y cuestiones del trabajo. Veremos cuál es el impacto. Ojalá sigamos así en la ciudad, con pocos infectados.

-¿Qué relación buscará tener con el gobierno municipal?

-Me he comunicado con el intendente cuando fue necesario por las cuestiones sanitarias. Tengo relación con varios secretarios. Vengo de trabajar en el Concejo, así que a muchos los conozco. Nosotros creemos que tenemos que dar vuelta la cara del puerto. Se mira siempre hacia el mar, porque es donde se va a pescar, pero tenemos que poner en funcionamiento de tal forma al sector para que el puerto pueda mirar a la ciudad y ser parte. Eso es un problema social, cultural. Si el puerto se sigue mirando el ombligo, no cambiamos el paradigma. Y nosotros estamos para cambiarlo, sin tocar ni afectar las cuestiones ligadas a la producción, es decir, la pesca. Tenemos una industria naval importantísima, es un sector de mucho interés en términos de negocios.

Pero hay que interrelacionarse con todos los actores, incluso con el sector frutihortícola. No se puede tener hoy una mirada que no sea regional. También debe haber una sinergia con otros puertos. Si nos asentamos sobre la base de los consensos, creo que podemos avanzar. Yo estoy muy esperanzado, hay una gran oportunidad.

El trabajo con Provincia

-¿Qué programa de acción se le planteó desde la Subsecretaría de Actividades Portuarias y el Ministerio de Producción?

-Vine trabajando fuertemente con el subsecretario Juan Cruz Lucero. Con él y su equipo he tenido varias charlas en tiempos de pandemia y antes. Hemos estado viendo de qué forma mejorar la operación del puerto. Porque si mejora eso, necesariamente vamos a tener más producción y más probabilidad de empleo. Acá llega pescado fresco, y alguien tiene que trabajarlo: esas son manos marplatenses.

Nosotros queremos resolver en base a lo que tenemos, pretendemos barcos bien activos. También hay que rever el tema del dragado y muchas obras de mantenimiento que no se vienen haciendo porque la gestión anterior priorizó otras cosas. Tenemos un montón de problemas por resolver. Este puerto tiene más de 1.000 clientes y hay que operativizarlo. Estamos muy metidos, y en contacto permanente con La Plata.

La gestión y la Ley de Puertos

-¿Se está pensando desde el gobierno provincial la posibilidad de eliminar los consorcios y avanzar con un nuevo modelo de gestión?

-Hoy estamos con el consorcio como veníamos, no hay ningún cambio, por ahora. Tenemos un contacto fluido con La Plata para que sean conjuntas las decisiones que tomamos en términos políticos y de gestión. Además, acá tenemos un muy buen directorio. Yo confío en ellos. Insisten en el hecho de que el puerto sea operativo, es el único camino que queda.

-¿Se revisará la Ley de Puertos?

-Sí, ya hay sectores que lo están estudiando. Imaginen la cantidad de participantes en esta discusión. Hay de todas las cámaras y los lugares del país.

La Terminal de Cruceros

-¿Qué se hará con la Terminal de Cruceros? Se inauguró en 2012, los barcos no llegan y la estructura comienza a deteriorarse con el paso del tiempo.

-Esas son las cosas que se hacen al revés. Primero se hace la terminal y después se quiere traer a los barcos. Estuvo equivocada la forma de plantearse. No es algo que nos preocupe en el corto plazo, porque tenemos cuestiones más importantes que resolver, que es la operatividad del puerto. Hay 52 barcos inactivos.

Contaminación y narcotráfico

-Hay empresas que operan en el puerto que enfrentan causas en la Justicia Federal por contaminación ambiental. ¿Cómo se reforzarán los controles?

-Estamos planificando una fiscalización más importante en el sentido de la producción, el trabajo que se hace, ingresos y egresos del sector. El puerto no puede ser un colador. Hay códigos internacionales que funcionan en algunos sectores y en otros, no. Hay una larga tarea por hacer.

-¿Se va a avanzar en medidas concretas para un mayor control del narcotráfico?

-Aduana está funcionando muy bien y ya nos reunimos para intensificar los controles. Prefectura y Senasa, igual. Sé que no ha habido casos referidos al puerto de Mar del Plata. Igual vamos a poner la mirada ahí, por supuesto.

Harineras bajo la lupa y la necesidad de tener consensos

-¿Qué medidas se impulsarán en torno a las harineras, que también han sido fuente de contaminación?

-Todavía no tenemos una decisión, pero hay un problema serio ahí. Yo vine hace unos días, a la tarde, a recorrer el puerto y había un olor tremendo, había problemas en ese momento. Es un problema muy difícil de resolver y que está pendiente. Pero sabemos lo que tenemos que hacer, siempre a través de una mesa de consenso. Si vamos e imponemos, no va a funcionar. Sólo vamos a terminar en multas. Hay que hablar con los gremios, los empresarios, las cooperativas, los armadores; sentándonos todos para discutir el pronóstico y las tareas a hacer de cara al futuro.