Un pediatra en la mira por “acto irresponsale”
Un médico se encuentra bajo investigación administrativa del área Legal del Ministerio de Salud Pública por la sospecha de haber llevado residuos peligrosos al Hospital de Albardón, donde se desempeña como pediatra, y dejarlos en el basurero de su consultorio. La hipótesis que manejan en la cartera sanitaria es que habría intentado eliminar desechos que se generaron en la clínica de su propiedad. Entre los elementos que se encontraron había tubos y gasas con sangre, jeringas y guantes usados, objetos considerados residuos patogénicos, ya que pueden contener enfermedades infectocontagiosas. Desde el punto de vista administrativo, resulta una irregularidad llevar ese tipo de desperdicios a un centro de salud y dejarlo en lugares inadecuados. Y por otro lado, una ley nacional, que se aplica en la provincia, establece que para el traslado debe haber una autorización de la autoridad ambiental, dijeron fuentes consultadas.
El profesional que está bajo la lupa es Ricardo Mazzanti, que posee un centro de estética y medicina regenerativa en Capital. En el Estado trabaja en el área de Pediatría del Hospital de Albardón y es delegado gremial del combativo Sindicato Médico. El ministro de Salud, Oscar Balverdi, aseguró ayer que “debido a la gravedad del hecho, se ha iniciado el sumario administrativo, ya que se trata de una conducta peligrosa y un acto irresponsable”. Al ser consultado, Mazzanti negó rotundamente haber llevado ese tipo de residuos, ya que dijo que “trabajo con un laboratorio, al que le doy toda la parte de desechos patogénicos, el cual está habilitado para el manejo de esos residuos”. Además, resaltó que la acusación “forma parte de la persecución de Balverdi, ya que siempre he sido un crítico de su gestión”. El titular de la cartera sanitaria además hará una denuncia en la Secretaría de Ambiente, por el supuesto transporte irregular de los desechos.
Los elementos que complican al pediatra son las grabaciones de las cámaras de seguridad del hospital albardonero. En las imágenes se ve que el 24 de enero, a las 8.08, Mazzanti ingresa al centro de salud con una bolsa negra. Ese elemento le llamó la atención al personal de la empresa de seguridad privada. Fue así que en el transcurso de la mañana, 2 guardias fueron hasta el consultorio del médico, quien ya no se encontraba, y hallaron la bolsa en el basurero. Al abrirla, descubrieron las jeringas y los tubos y las gasas con sangre, entre otros objetos. Los encargados de la seguridad informaron de la situación a la jefa de la zona sanitaria, quien a su vez elevó la denuncia a Salud Pública.
Sin brindar una opinión sobre el hecho puntual, Yalia Daroni, subsecretaria de Desarrollo Sustentable, explicó que la Ley de Residuos Peligrosos establece que el generador de esos desechos, debe tener un lugar interno de acopio en condiciones, fuera del contacto de pacientes o terceros, para que quede a disposición de la empresa transportista y operadora habilitada para el traslado. En la provincia, la única compañía con autorización de Ambiente para el transporte es Tecma. En este caso, la bolsa quedó en el basurero de un consultorio en el que se atienden niños. Si el sumario administrativo arroja que el profesional cometió una irregularidad, puede recibir una sanción que va desde un llamado de atención hasta la cesantía. Por otro lado, si la investigación que se desencadene por la denuncia que se hará en Ambiente también determina que hay una infracción, el castigo va desde multas hasta la clausura de la clínica.
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