Por Pablo Lapuente

A 26 días de las elecciones generales, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta compartieron este martes por primera vez desde las PASO una recorrida de campaña que comenzó en Lanús y terminó en Lomas de Zamora. Subidos a la Patoneta, el motorhome en el que la candidata a la presidencia por Juntos por el Cambio (JxC) busca llegar al ballotage, halcones y palomas dieron un mensaje de unidad y lanzaron críticas contra Sergio Massa y Javier Milei, postulantes de Unión por la Patria (UP) y La Libertad Avanza (LLA), respectivamente, a quienes las encuestas ubican en al delantera en la carrera con podio para dos.

La fotografía entre la ex ministra de Seguridad y el jefe de Gobierno de la Ciudad sirve también para ahuyentar fantasmas de fuga de votos moderados hacia el candidato del oficialismo, que en las últimas horas hizo un llamado a la unidad nacional mientras tenía a su espalda a los gobernadores radicales Gerardo Morales (Jujuy) y Gustavo Valdés (Corrientes) que en la primarias trabajaron por el proyecto de Larreta.

Si bien el cacique jujeño salió rápidamente a despegarse de este tipo de lecturas, al aclarar que su presencia se debió sólo a una actividad de carácter institucional, la invitación de Bullrich a Larreta contribuyó a cerrar filas casi de manera definitiva entre los sectores que compitieron en agosto. De la actividad de este martes también participó Diego Santilli; el diputado se comprometió en los últimos días a recorrer 24 distritos antes del 22 de octubre para empujar la candidatura a la gobernación de Néstor Grindetti.

El encuentro de Bullrich con Larreta fue cerca del mediodía en Lanús. El alcalde, que llegó casi dos horas después de que comenzara el acto de inauguración del centro de monitoreo del municipio, esperó parado en la entrada del edificio a que la candidata a presidenta terminara su discurso. El diputado Cristian Ritondo salió del acto a recibirlo; unas horas antes habían compartido una cena para afinar la fusión de campañas.

Bullrich y Larreta subieron a la Patoneta y viajaron hasta Lomas de Zamora, enclave del peronismo y base de operaciones del jefe de Gabinete, Martín Insaurralde. En el breve trayecto de 20 minutos entre un punto y otro -también viajaron en la Patoneta Grindetti, Santilli y Ritondo- acordaron mostrarse juntos el domingo en el debate presidencial.

Según pudo saber Letra P, la exministra se lo pidió y el alcalde aceptó rápidamente, a tono con su idea de mostrarse cien por ciento dispuesto a plegarse a la estrategia de su exadversaria. Hablaron sobre alguno de los ejes en los que Bullrich es más fuerte, como seguridad, y sobre el concepto de orden, el latiguillo de campaña de los halcones.

En los equipos de campaña creen que pueden persuadir a un sector del electorado conformado por personas de alrededor de 30 años de edad que votó por el libertario, pero es permeable al discurso de JxC que confronta “gobernabilidad con improvisación”; un votante de Milei joven pero con varias elecciones a cuestas, más propenso al análisis en comparación con el elector más joven y más visceral.

Bullrich ahondó en la doble grieta, la que lo separa del ministro-candidato y la que inaugura con el economista de pelos revueltos, a quienes criticó casi por igual en su discurso en Lomas de Zamora, el distrito al que viajó para respaldar al candidato local Guillermo Viñuales. En ambos lugares, a Larreta se lo vio relajado, cómodo en su papel de escolta y alineado en las críticas alusivas al peronismo y al ultraliberalismo. “Cumplimos con nuestra palabra y estamos todos juntos para ganar el país junto a Patricia, porque tenemos un equipo que tiene experiencia y sabe gobernar”, sostuvo Larreta y alentó a militar “casa por casa” de cara al 22 de octubre.

La idea de mostrarse como la única oposición al kirchnerismo con gobernabilidad también intenta cercar los límites de LLA. Aun así, un dirigente de peso que acompañó a Bullrich en la Patoneta se sinceró ante Letra P: “Estamos juntos y muy bien para pelear el ballotage; eso sí, necesitamos que Milei encuentre su techo en los 35 puntos. Si no crece más que eso, vamos a competir con él en noviembre y tendremos posibilidades de ganar, si supera ese porcentaje estamos fritos”.