Seis meses faltan. Los amantes del folclore lo tienen bien claro. La última semana de enero está reservada para el Festival Nacional de Cosquín, cuando la plaza Próspero Molina se transforma en el punto de juntada para los amantes de nuestra música de raíz. Aunque para la edición 2016, la cuestión viene medio lenta. Como que hay ganas de tomar mate, pero aún nadie prende la pava.

Como se sabe, los últimos años fueron bastante complicados para este mítico festival. Las malas administraciones llevaron a conflictivos momentos y hasta a la salida de un intendente: el kirchnerista Marcelo Villanueva, a través de una consulta popular. Durante su gestión, quedaron muchas deudas y varios reconocidos artistas dejaron de tomar parte del festival.

En la última edición, el gobierno provincial brindó su apoyo para que se pudiera desarrollar. Ahora bien; el punto es que la actual intendenta, Rosanna Adaglio (Unión por Córdoba), dejará el poder en manos de su flamante sucesor electo, el socialista Gabriel Musso. Entonces, ¿quién se hará cargo de la organización del Festival?

“Todavía no se definió nada. Nosotros asumimos el 10 de diciembre y el festival está ahí, a la puerta. Por lo tanto, le pedimos al actual gobierno participar en el armado desde ahora. Pero nos tienen que responder”, le contó Musso a Día a Día.

–¿Es Adaglio quien tiene que encarar el armado del Festival?

–Es tan desastre el tema de la ley 8102 para Cosquín que hace que queden estos grises y no sabemos quién tiene que hacerlo. Por eso pedimos instalarnos nosotros y estamos esperando la respuesta. Recién ayer (por el martes) tuvimos la primera reunión y esperamos para el fin de semana una respuesta. Y esperamos que sea así por el bien de la ciudad. Con el Pre Cosquín ya estamos muy atrasados. En el festival ya hemos estado y sabemos lo que es. Pero no nos queda mucho tiempo.

–En virtud de lo que pasó en los últimos años, ¿no hay temor que se desprestigie un poco la marca del festival?

–Cosquín sigue teniendo una marca fuerte. En los últimos años se hicieron cosas que la verdad no corresponden con el festival. Pero venimos para recuperar la identidad de Cosquín y a llevar adelante un folclore todo el año. Desde el Estado venimos a plantear eventos y a apuntalar eso de la Capital Nacional del Folclore, que es lo que siempre dijimos que éramos y nunca lo fuimos. Hoy venís a Cosquín y no te encontrás con nada folclórico. Esto habla de darle a la ciudad una serie de hitos, nomencladores, accesos, museos y recuperar cada una de las escuelas de folclore, cerámica y música para darle vida en unos años a algo que hace mucho tiempo que queremos: la Universidad Nacional del Folclore. Queremos que haya una feria permanente y una serie de hechos que hagan que vos vengas de cualquier parte del país y encuentres de verdad a la Capital Nacional del Folclore. No lo que está pasando los últimos años, que tenemos un festival y nada más. El que habla fue el creador del Cosquín de Peñas y el Festival del Duende, una movida que intentamos hacer desde las instituciones para que se rompa la estacionalidad y se puede llevar adelante el folclore de otra manera. Así que la marca sigue estando fuerte y estoy convencido que la vamos a seguir fortaleciendo. Nací a 20 metros de la Plaza así que lo nuestro es muy de corazón.

–¿Y el tema económico?

–Siempre fuimos austeros e ingeniosos. Siempre hicimos todo con un cuchillo y un tenedor. Hemos pedido informes sobre cómo está el estado actual del municipio y el real de la Comisión Municipal de Folclore. Sabemos que el último pedido a la Provincia había sido de 7.600.000 pesos y la provincia no ha cumplido con esto. Quedan deudas, pero sobre todo de las ediciones anteriores, que fueron las últimas de Villanueva. Estamos esperando respuestas sobre esto y sobre qué va a hacer la Provincia. También estamos esperando entrevistas con el gobernador electo (Juan Schiaretti, quien también asumirá el 10 de diciembre) para empezar a hablar de estos temas y lo que hace al ámbito municipal.

–¿Nación no?

–Nación también. Ahora con el Cosquín de Peñas tuvimos a gente de Cultura de la Provincia. Hemos estado intercediendo para que ayuden acá y lo han hecho. Con Nación tenemos muy buena relación, con la Secretaría de Cultura y Teresa Parodi. Pero nosotros, en realidad, al no tener vínculos políticos ni con Nación ni con Provincia tenemos relación con los dos. Y eso es una ventaja. Esperaremos también para ver quién resulta electo como Presidente de la Nación.