Tiene una connotación histórica el partido de esta noche: será el centésimo choque entre Paraguay y la Argentina , desde el 5-1 de nuestro seleccionado en un amistoso en 1919.
Y también el encuentro posee una trascendencia de rigurosa actualidad, un valor en sí mismo, porque el equipo de Martino no debería demorarse en enderezar el rumbo torcido que tomó tras el debut con derrota ante Ecuador en el Monumental. El director técnico ayer lo dejó en claro: "Lo que perdimos de local hay que ir a buscarlo de visitante". Al Defensores del Chaco más precisamente, a partir de las 21.
Tiene una rápida posibilidad la Argentina de lavar la pobre imagen que dio el jueves. Demostrar que fue un paso en falso aislado, una de esas noches en las que el equipo se extravía y su plan es superado por la estrategia rival, que fue lo que ocurrió. Ahora bien, la oportunidad le llega en un momento en el que el plantel se le desarmó bastante respecto de la idea original. El mayor lamento sigue siendo por Messi , al que le siguió un goteo de bajas casi a diario. De la lista original de 27 futbolistas se cayeron siete, distribuidos en las tres líneas: dos defensores ( Rojoy Garay ); tres volantes ( Banega , Biglia y Enzo Pérez ), y dos delanteros (Messi y Agüero ). El Tata sólo agregó a Lamela, y de lo que le quedó, Pastore se repone de una sobrecarga muscular y Pereyra recién ahora puede ser tenido en cuenta tras una lesión en la cadera derecha.
Para lo que se supone un partido de suma importancia, la formación, sin llegar a ser improvisada, tiene algo de remiendo, de experimental. En relación a Ecuador se contabilizan cuatro o cinco cambios. Desafectado Garay por el nacimiento de la hija en los Estados Unidos, habrá una zaga central nueva, integrada por Otamendi y Funes Mori. El Tata se inclinó por el nuevo refuerzo de Everton por delante de Demichelis, con poca continuidad en Manchester City. El técnico, que lo hizo debutar en la gira de marzo por los Estados Unidos, pondera la agresividad para marcar y la postura de caudillo del ex River. Otamendi, que en el ciclo de Martino compartió la zaga con Garay en seis partidos y con Demichelis en otros cuatro, pasará de primer central.
El puesto de volante interior fue el más afectado con las exclusiones de Biglia, Banega y Pérez. Biglia, Mascherano y Pastore es la línea media con más presencias, con ocho encuentros. Hoy tendrá el debut por cotejo oficial Kranevitter, que se presentó el mes pasado en el amistoso 7-0 a Bolivia; cuatro día después jugó los 15 minutos finales contra México. Cuando ingresó por Demichelis, Mascherano pasó a la zaga. Esta noche, Kranevitter será ladero del capitán. Lo mejor de ambos es en la función de volante central. Habrá que ver si no se superponen; tiempo de trabajo no tuvieron.
Uno de los que más quedó marcado en la caída ante Ecuador fue Pastore. No sólo por el bajo nivel, algo extensivo al resto de sus compañeros, sino porque fue reemplazado. Algún fantasma le habrá sobrevolado al exquisito media-punta de Paris Saint Germain. En el ciclo de Sabella, tras un decepcionante 1-1 ante Bolivia por las eliminatorias en el Monumental, Pastore desapareció de las siguientes convocatorias. Hoy dispondrá de un desquite.
Tevez será el N° 9, si bien admitió que en este momento de su carrera se siente más cómodo unos metros más retrasado, detrás de una primera punta. Martino ayer no se mostró intransigente, entiende que el Apache necesite arrancar desde más atrás, pero lo descartó para ir por los costados. Habrá que ver qué resulta de esta negociación técnico-jugador; si se potencia o queda a mitad de camino, intrascendente, entre ambas demarcaciones.
Si ingresa Lavezzi (Pocho o Correa es la duda), Di María volvería a la izquierda. El entrenador aseguró ayer que la "idea" de juego, que fue bastante vapuleada en algunos corrillos futbolísticos luego de Ecuador, "no se negocia". Que no quiere contradecirse con lo que le viene inculcando al plantel desde hace más de un año. Y que dentro de esa idea "hay soluciones" para no sufrir por los costados como sucedió con Valencia y Montero. Más, que no pudo parar al volante de Manchester United, esta noche se las verá con Derlis González, menos potente que aquél, pero sí más gambeteador.
Paraguay llega más tranquilo por el éxito conseguido con una cuota de fortuna en Venezuela. Ramón Díaz mantendría el 4-4-2. Entrará Cáceres en el doble pivote con Ortigoza y Ortiz se correría a la izquierda, en lugar del más ofensivo Benítez. Sin Bobadilla, el Pelado podría sorprender en el ataque con el debut del veloz Darío Lezcano, de 25 años, los últimos ocho en el fútbol suizo. En ocho partidos de esta temporada con Lucerna hizo nueve goles (3 de penal). "La humildad y el sacrificio son el camino. Vamos a meterle un partido muy duro", pronosticó ayer Ramón, mientras la Argentina se ve abocada a sacar fútbol y fuerza de sus últimas e inesperadas debilidades..
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