El secretario de Finanzas, Diego Bastourre, dijo en el Congreso sólo el 10% de las necesidades de financiamiento son en dólares. Rigo y Montagu también expusieron.
El Gabinete el ministro de Hacienda Martín Guzmán expuso durante cinco horas el proyecto de presupuesto 2021 en la Cámara de Diputados y deberán volver a conectarse el viernes para responder preguntas de la oposición.
Los secretarios de Hacienda, de Política Económica y de Finanzas, Raúl Rigo, Haroldo Montagu y Diego Bastourre, exhibieron filminas antela Comisión de Presupuesto presidida por Carlos Heller, quien no tenía habilitado más tiempo de conexión, pidió un cuarto intermedio y los comprometió a escuchar en tres días.
Bastourre fue último en hablar pero dejó una definición: consideró alcanzable cubrir el déficit de 4,5% que contempla el presupuesto porque la renegociación de la deuda alivió la carga de intereses y permite buscar un financiamiento en pesos.
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"Es un programa financiero realista y prudente porque es consecuente con otro de los objetivos que es el desarrollo del mercado de capital local y porque hace un uso razonable y equilibrado de las diferentes herramientas de financiamiento. De cada 10 pesos que tenemos que financiar, 9 serán en pesos", ponderó.
De todos modos, consideró "un verdadero desafío" conseguir cubrir las necesidades netas de financiamiento, calculadas en 3.15%. "Cuando decimos que este es un presupuesto viable también estamos mirando estas cosas: pocas necesidades de endeudamiento en divisas y también un 2021 en el cual los vencimientos son con el sector público nacional, con lo cual tenemos un punto de relativa ventaja frente a 2020".
Es un programa financiero realista y prudente porque es consecuente con otro de los objetivos que es el desarrollo del mercado de capital local y porque hace un uso razonable y equilibrado de las diferentes herramientas de financiamiento. De cada 10 pesos que tenemos que financiar, 9 serán en pesos.
Montagu usó una hora para exhibir filminas la caída de este año, con un 12.6% del PBI en el primer semestre, pero un repunte en junio, cuando la capacidad instalada de la industria alcanzó el 56,8%, después de haber tocado un piso de 33% en abril.
Destacó que el superávit comercial es de 11 mil millones de dólares, pero con una caída del volumen de comercio y la inflación, que tuvo un pico de 55% el año pasado descenderá paulatinamente cada diciembre. Será de 32% este año, 29% en 2021, 24% en 2022 y 20% en 2023. Y que dedicó el 7% del PBI a planes necesarios para reactivar la economía. "El rol que nos proponemos con este presupuesto es tranquilizar la economía", señaló Montagu.
El secretario describió también que en el sector de los servicios hubo un "impacto heterogéneo. Algunos resultaron severamente afectados como la hotelería y restaurantes con caídas del 80% en abril. A diferencia del sector de la construcción, la recuperación en estos sectores es menor", dijo.
"La idea con este presupuesto es construir un puente entre la economía que tenemos y que enfrentamos ahora y la economía que queremos alcanzar, estable. Este es el rol que nos proponemos con este presupuesto, de tranquilizar la economía. Para cada una de las prioridades hay una o varias partidas presupuestarias que lo respaldan".
"Este presupuesto pone el foco en la economía real como motor de la recuperación de la economía Argentina. No hay recuperación de la actividad económica sin un rol del Estado que acompañe y complemente al sector privado".
"Lejos de querer presentar un panorama de recuperación plena, en mayo se creció cerca del 10% y en junio 7,5%, y en julio 1,1%". Es decir que de a poco se va recuperando esta caída fuerte pero todavía lejos de los niveles de antes de la pandemia", continuó.
Rigo, un histórico redactor de los presupuestos, dijo que el de 2021 "propone un nivel y una composición del gasto primario que permita al Gobierno llevar adelante una política fiscal expansiva". En tercer lugar, detalló que el proyecto "busca proponer un nivel de déficit fiscal", en torno al 4,5%, que sea financiable. "Todas las políticas públicas que se proyectan tienen un financiamiento genuino; con una apuesta muy clara a la inversión pública, a la innovación y al desarrollo".
Describió un crecimiento del PIB de 5,5%, un consumo privado creciendo al 2%, un tipo de cambio nominal en diciembre de $102,4 y un IPC en diciembre de 29%. Y una fuerte inversión en educación y conectividad, que representará el 1,3% del PIB; mientras que el quinto y el sexto será la inclusión social activa y las políticas de género y diversidad, respectivamente. "El proyecto de ley de presupuesto está construido sobre supuestos realistas", agregó.
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