El desdoblamiento de las elecciones en Resistencia, anunciado la semana pasada por la intendenta y candidata a gobernadora por Vamos Chaco, Aída Ayala, movió el tablero y sacudió el escenario, pese a ser una medida que en los búnkeres políticos se daba por descontada.

Lo cierto es que Resistencia votará este domingo en las PASO -junto con el resto de la provincia- pero las generales aún no tienen fecha. Otra diferencia es la implementación del sistema de voto electrónico, también confirmado por Ayala.

La medida de la jefa comunal motivó opiniones y reacciones en distintos espacios políticos y, sobre todo, en el justicialismo y los partidos aliados, desde donde se rechazó el desdoblamiento de fechas.

«Es una expresión de temor y especulación ante una posible derrota electoral», indicaron desde el Frente Grande (FG), fuerza que integra el Frente Chaco Merece Más.

«Ayala tiene temor a la derrota política y ya lo manifestó cuando hizo objetar la imagen de (el gobernador y precandidato a intendente de Resistencia) Jorge Capitanich en la boleta electoral», aseguró el presidente del FG a nivel nacional Daniel San Cristóbal.

«Esta decisión confirma su debilidad política que es consecuencia de la formación de una coalición de amigos de ideología de centro derecha o de dirigentes de la UCR que sólo le son leales», acotó el ex diputado provincial.

El dirigente frentista volvió a cuestionar tanto la gestión que lleva adelante Ayala en la capital provincial desde 2003.

«Estas y otras acciones anticipan hechos: mientras Capitanich en un proyecto político colectivo baja a disputar un cargo de segundo nivel para asegurar la victoria del frente electoral que lidera, Ayala prefiere liberarse del compromiso electoral de Resistencia que es el lugar donde gobierna hace doce años. Esto se llama temor», insistió San Cristóbal.

Para el FG el desdoblamiento de los comicios en la ciudad «es una expresión de temor y especulación de la intendenta  que así intenta despegarse de que el muy fuerte liderazgo de Capitanich termine con su aspiración personal de ser gobernadora».

«CONSERVADORA  Y VERTICAL»

San Cristóbal también cuestionó las alianzas trazadas por Aída con el macrismo y el massismo, espacios con los que acordó lugares en las boletas de diputados y concejales a cambio de respaldo y estructura.

«Mientras el gobernador asume las demandas que políticas como la que le planteó la presidenta de la Nación Cristina Fernández de Kirchner para ser jefe de Gabinete ahora se ocupa del armado de un frente electoral que responda a esos intereses nacionales y populares que son los que sostiene en su gestión provincial y Ayala expulsa a la estructura política que la sostuvo estos años -la de la UCR- para sostener una construcción conservadora vertical donde ella es la única estrella que pretende brillar», criticó el actual interventor de Secheep.

«La suma de valores que se consideran previos a un acto electoral son los que inquietan a Ayala porque Capitanich es una muy fuerte atracción por una gestión que cambió la historia del Chaco que empezó a reconstruirse desde 2007 para transformarse en la provincia de mayor desarrollo y crecimiento del nordeste», puntualizó el titular del FG.