BRUSELAS.- En momentos en que la espiral de violencia que estremece a Siria continúa desangrando al país, Occidente se volvió a movilizar ayer en busca de nuevas medidas para contrarrestar a las fuerzas del régimen de Bashar al-Assad.

Tras un intenso y prolongado debate, Europa alcanzó un acuerdo para levantar el embargo de armas que pesaba sobre Siria, mientras que los jefes de la diplomacia de los Estados Unidos y de Rusia se reunieron en París para precisar el marco de una conferencia de paz en Ginebra sobre el conflicto.

La posibilidad de armar a los rebeldes había cobrado nuevamente relevancia debido a las recientes victorias militares de las fuerzas de Al-Assad y las denuncias del uso de armas químicas contra la población.

En Bruselas, los ministros de Relaciones Exteriores de la Unión Europea (UE) mantuvieron un áspero debate sobre la posibilidad de suministrar o no armas a los rebeldes sirios. Y, tras más de seis horas de discusión, el canciller británico, William Hague, anunció anoche que se había llegado a un acuerdo para levantar el embargo a partir del 31 de mayo.

La decisión "es un fuerte mensaje de Europa al régimen de Al-Assad'', dijo Hague, que precisó que el acuerdo no implica el "envío inmediato" de armas a los rebeldes. "Simplemente, nos da flexibilidad para responder en el futuro en caso de que la situación siga deteriorándose'', puntualizó.

Si bien no trascendieron los detalles del acuerdo, medios europeos indicaron que todos los países se habrían comprometido a no entregar ningún equipo hasta el 1°de agosto.

Hasta ayer, la UE se había mostrado fuertemente dividida sobre el tema. El fin del embargo encaraba una sólida oposición por parte de algunos países, como Austria, para los que el envío de armas sólo sirve para aumentar los muertos en Siria -que ya suman más de 90.000- y perjudicar la reputación de la UE como mediadora de paz.

Gran Bretaña y Francia, por el contrario, buscaban relajar el embargo y apoyar a los rebeldes, de cara a la conferencia de paz patrocinada por Estados Unidos y Rusia, prevista para el próximo mes. Tanto Londres como París afirman que no tienen planes inmediatos de armar a los rebeldes, pero señalan que aliviar el embargo fortalecería a Occidente y a la oposición en las negociaciones con Al-Assad.

"Se espera que Europa esté unida. Si por desgracia ofrecemos un espectáculo de división (...), ello reducirá nuestra influencia", había destacado antes del inicio de la reunión en Bruselas el ministro de Exteriores de Francia, Laurent Fabius.

Hague también indicó que todas las otras sanciones impuestas por la UE al régimen sirio, que incluyen una gran batería de medidas diplomáticas, financieras y comerciales contra Damasco y que vencían este viernes, continuarán vigentes por un año más.

Sospechas

El acuerdo de la UE ocurrió el mismo día en que Francia aseguró que existen sospechas "cada vez más fuertes del uso localizado de armas químicas" en Siria, lo que fue confirmado a su vez por una investigación del diario Le Monde.

"Estamos comprobando todo esto con extrema precisión", señaló Fabius, que tuvo que abandonar la reunión en Bruselas antes de que finalizara para reunirse en París con el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, y el canciller ruso, Sergei Lavrov, con quienes mantuvo conversaciones sobre la conferencia sobre Siria en Ginebra. Esa cumbre, que debería reunir a representantes del gobierno de Al-Assad y de la oposición siria es, para muchos, la última esperanza de poner fin por medio de la política al conflicto armado.

El régimen de Al-Assad ya expresó su intención de participar de la conferencia, mientras que la fracturada oposición siria aún mantiene debates internos al respecto: si va a Ginebra, perdería la influencia que tiene sobre los revolucionarios y comandantes rebeldes activos que rechazan categóricamente cualquier negociación con el régimen. Pero si no participa, pondría en riesgo el respaldo político de los norteamericanos y posiblemente también el apoyo de los países árabes que en los últimos meses los ayudaron a armarse.

Otro escollo es que Rusia desea que Irán, que también respalda al gobierno de Damasco, participe de las negociaciones, posibilidad que los países occidentales descartan.

La conferencia, cuya fecha exacta aún se desconoce, será la segunda que se realiza en Ginebra para tratar el tema sirio. La primera, que tuvo lugar en junio de 2012, había reunido a los jefes de la diplomacia de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU (Estados Unidos, China, Rusia, Francia y Gran Bretaña), así como países representantes de la Liga Árabe, Turquía y los secretarios generales de la ONU y la Liga Árabe.

Las iniciativas diplomáticas

Occidente e Irán presentan alternativas para poner fin al conflicto

Se levanta el embargo

La Unión Europea (UE) dejará sin validez a partir del viernes su embargo de armas a la oposición siria, aunque los Estados miembros se comprometieron a no entregar armamento hasta el 1° de agosto y a respetar toda una serie de condiciones. Cada Estado decidirá individualmente las posibles exportaciones de armas

Conferencia de Ginebra 2

El ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Lavrov, y su homólogo norteamericano, John Kerry, se reunieron ayer en París para discutir detalles sobre la conferencia "Ginebra 2", que debería reunir a representantes del gobierno de Bashar al-Assad y de la oposición siria. La primera conferencia fue en junio de 2012

Conferencia de paz en Irán

Irán, aliado regional del régimen sirio, celebrará mañana una conferencia internacional para una "solución política" al conflicto en Siria. Se esperan "más de 40 países, así como un representante del ex secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan", precisó el vicecanciller iraní, Hosein Amir Abdollahian

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Un conflicto que ya involucra a 40 países

Agencias AP, AFP, DPA, EFE y ANSA

Del editor: qué significa.

La diplomacia finalmente da pasos importantes para frenar el drama, pero muchos creen puede ser demasiado tarde o hasta contraproducente.