En su paso por Nueva York, el papa Francisco visitó ayer a los estudiantes de la escuela St. Ann, en el barrio de Harlem. Allí fue recibido por alumnos de cuarto grado, entre los que se encontraba uno que tenía algo en común con él: su raíz territorial.

Benjamín Grassia, de 9 años, es hijo de padres tucumanos y tuvo la posibilidad de hablar cara a cara con el Sumo Pontífice, a quien le regaló la camiseta de Atlético, club del que es hincha.

En diálogo con TN, en la previa, el niño adelantó que le preguntaría sobre su vida y que charlarían de fútbol. "Le preguntaría si extraña Argentina, por qué es de San Lorenzo y qué lo que más le gusta de ser Papa", manifestó.

Silvina Grassia, la mamá de Benjamín, dijo que su hijo y sus compañeros habían pasado los últimos días conociendo mejor a Francisco. Una monja mendocina, la hermana María del Jesús, colaboró en la tarea ya que hace tres años enseña religión en la escuela. "He estado ayudándolos. Me parece que ellos ven la alegría en nosotros, y por medio de esa alegría es como que se han ido dando cuenta", señaló.