No hubo, en los meses de campaña previa a las PASO, un solo candidato nacional, provincial o municipal que no haya dedicado extensos fragmentos de sus discursos a la lucha contra la corrupción y la necesidad de reglas más claras. Tampoco hubo uno que, a la hora de la verdad, respetara la veda electoral.
La lista es francamente interminable. Unión Ciudadana viralizó un video de Cristina Fernández de Kirchnerasegurando que “un voto a Unidad Ciudadana debe ser el límite a éste gobierno”. Cambiemos replicó un video de la participación de María Eugenia Vidal en el programa Intratables. Otra vez apeló a la gobernadora, que no es candidata a nada. Otra muestra más de que en el oficialismo no ven la hora de deshacerse de Esteban Bullrich y su desastrosa campaña política.
Nicolás del Caño viralizó un video que lo muestra dando un épico discurso en el Congreso. A diferencia de sus competidores, priorizó YouTube por sobre otras plataformas como Twitter y Facebook.
En la ciudad de La Plata, los candidatos optaron por una estrategia igual de poco original. Federico Martelli, que a pocas horas de la elección sufrió una violenta entradera en su casa, mostró un emotivo discurso por la red social Facebook. El joven secretario general del Movimiento de Unidad Popular pronto destronará a Carlos Castagneto como el político con mayor cantidad de fracasos electorales de la ciudad. El candidato de 1País a la diputación provincial José Ramón Arteaga continuó presentando su propuesta de “Alerta Buenos Aires”, una aplicación para celulares y una sirena que avisa al 911 ante situaciones de peligro.
En este sentido, la falta de actualización de las leyes electorales ha creado un vacío legal en relación a las redes sociales, dado que no están alcanzadas por la prohibición de realizar declaraciones en tono proselitista. Como siempre ocurre en la arena política, cada laguna legal se aprovecha hasta que no quede una gota de agua en ella. Aunque en ello se nos vayan las pocas reglas claras que quedan en pie en el país.
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