Una de las tradiciones características es la denominada “limpieza” de la casa a través de sahumerios. En esta fecha el Noa recuerda el origen del hombre. Las celebraciones tienen raigambre andina.
Para el profesor Osvaldo Maidana, estudioso de la mítica profunda del continente, la impresión de los primeros españoles que presenciaron los rituales de la Madre Tierra fue la de estar frente a un totemismo, ?y no comprendían el sentido de la ofrenda, porque con ese acto, mínimo y gigante a la vez, el hombre cumple con lo que corresponde?, dice Maidana. ?La Pacha como centro del Universo. El Centro Cósmico. Pensamiento que gravita en la conducta mística de los hombres y pueblos de estas regiones. Ahora, ya hemos entramos al nuevo Pachakuti ciclo de 500 años-. Y nos tocan otros quinientos años con la Tierra y en la Tierra?, asegura el estudioso.
?Corpachemos, compadre?
Aunque los pueblos que se extienden al pie de los Andes cuentan cada uno con sus particularidades para encarar el ritual de la Pachamama, en general los actos comienzan el día anterior con la quema de basura, objetos o prendas de vestir considerados como carga excedente. El mismo trato reciben posibles desencuentros y enfados: en el Centro de Residentes Vallistos y Puneños ubicado en Villa Primavera de la ciudad de Salta, se reúnen vecinos y compadres para revalidar sus relaciones. Es un ?día del perdón? andino, donde se saldan dolores y viejas rencillas y, ya sin suspicacias,a lo largo del día se hace la entrega a la Tierra, para luego encarar la vida diaria sin rencores.
En los pueblos campesinos del Noa, se marca el ganado y se ?casan? animales de la misma camada. A veces se los marca con lanas de colores o se le hacen tocados a las hembras.
El ritual se lleva a cabo ?dándole de comer a la tierra?. Para ello se ?abre la boca? del planeta un pequeño hoyo- y se ?corpachan? Coca, cigarrillos, fósforos, alcohol o comida, partes de la ofrenda. Se ?corpachan?, no se etierran, ?como se hace con un muerto?.
Este término, según Solá, proviene del quechua ?korpatjay?, hospedar, y según Lira, es una expresión que proviene del término ?k?urpachay?, cubrir con terrones. Mientras, el oficiante recita en voz baja ?Pachamama, Santa Tierra, ¡kusilla, kusilla!? (¡con alegría, con alegría!) y pide por sus seres queridos, por su hacienda, sus negocios y por sí mismo. Luego se sahúma el lugar con ramitas aun verdes de coa u hojas de molle.
Las ?bocas de la Tierra? se abren cerca de las casas o en donde se trabaja con la hacienda. También se ?corpacha? en las ?apachetas?. Se trata de simples monolitos de piedras encimadas, que se levantan a la vera de los senderos, recuerdan al caminante los peligros del camino. No necesariamente debe ser el primero de agosto para dejar ofrendas, quienes pasan cerca suyo dejan cigarros, coca o lo rocían con una bebida. Pero para el primero de agosto, las apachetas son reconocidas como señales de la tierra. Apuntan a lo decisivo de las condiciones que la Tierra impone a la vida en general.
Las celebraciones
Los festejos en San Antonio de los Cobres: La ceremonia central de ofrenda a la Pachamama será el sábado en San Antonio de los Cobres. Los coloridos agasajos se extenderán durante todo agosto no sólo en la Puna, sino también en los Valles y otros puntos de la provincia, que se sumarán a este ritual en el que se agradece a la Madre Tierra por todo lo recibido.
El Carril figura como unos los puntos turísticos más destacados dentro del Calendario Ritual de la Madre Tierra organizado por el Ministerio de Cultura y Turismo.
El domingo se realizarán las ceremonias en esta localidad más precisamente en el Predio de Estación Facundo de Zuviría a hs. 12.00 como segundo año consecutivo.
El culto contará con la presencia de Severo Báez Integrante del Centro de Residentes Vallistos y Puneños como así también de autoridades locales.
Además habrá Feria de Comidas Regionales y espectáculos folclóricos como ya es habitual los domingos en la Estación, a esta actividad se le suma la sahumada de vehículos y maquinaria, por otro lado se invita a los medianos y pequeños productores para que ese día tan tradicional brinden sus ofrendas a la Madre Tierra .
Cómo es el ritual para la ?limpieza? de las casas
No solamente Salta, sino las grandes ciudades del Noa como San Miguel, San Salvador o Catamarca, los primeros de agosto se caracterizan por los aromas que los sahumerios desparraman en el aire.
En la madrugada ya se han sahumado las casas con resinas o productos especialmente realizados para la ocasión. Luego de recorrer cada esquina de la casa, se abren las ventanas para que el humo se lleve las ?maldades? y el viento las deshaga. Agosto es un mes de vientos fríos, ?wirapuka?, que llega con las enfermedades, donde el ganado debe afanarse para encontrar buenas pasturas y el invierno da sus últimos golpes.
El hombre de este hemisferio, se prepara también para la primavera, que se avecina con el nuevo equinoccio. Para los historiadores occidentales, el ritual de la Pachamama tiene un sentido propiciatorio. Con él se potencia el ciclo de la vida, ciclo eterno de muerte y renacimiento. A la llegada de los conquistadores, el culto a la Pachamama estaba extendido en todos los pueblos bajo la influencia del Cuzco, capital del imperio Inca.
Comparándolo, el concepto se hace extensible a otros pueblos americanos, donde la relación entre el hombre y su medio ambiente, es primordial para existencia humana. Un documento al respecto, es la carta enviada por el jefe Seattle al presidente norteamericano Wilson, respondiendo a su ?invitación? para dejar sus ?tierras ancestrales?. ?Usted dice- nos pide que le vendamos la tierra en la que vivimos. Nosotros nos preguntamos ¿Cómo vender la Tierra? Cada árbol, cada pequeño pasto contiene la historia de la vida de nuestro pueblo. ¿Cómo vender el resplandor en el agua, el aliento de la arboleda? La Tierra no nos pertenece, ¡nosotros le pertenecemos a ella!?
Los poderes curativos que tienen la tierra
En todos los procesos curativos en los cuales participa la medicina popular de esta región, el curador se remite a la Pachamama.
Es la presencia de fondo en cada situación particular de la vida humana. Son varias también las enfermedades producidas por la Tierra.
La más común es la ?agarrada de la tierra?, ?pachachare?, en quechua, donde el enfermo ?pierde el alma?, padece de dolores corporales y se cubre de pequeños granos.
Néstor Homero Palma señala que para el hombre andino ?la tierra es mala en algunos sitios?, denominados ?lugares bravos?.
?En la concepción animista que el nativo dice- tiene del mundo que lo rodea, la Tierra ocupa un lugar principal. Ella es la dueña de los animales, de las plantas y de los sitios en los cuales se construyen las casas y los corrales. Por eso, cuando se trasladan a una nueva casa o cuando, en una ?señalada?, una persona marca a los animales, debe ofrecer a la tierra coca, chicha y tabaco para pagar a la Madre Tierra lo que ella le ha brindado. Pero la Tierra también puede ser mala, porque alberga espíritus malignos o porque castiga a quienes olvidan venerarla o la menoscaban. Entonces los ?pilla?, provocándoles dolores y malestares?, dice Palma.
Según el sabio boliviano Enrique Rocha Franz, existen conceptos del hombre americano a los cuales nos es difícil penetrar ?por las barreras del lenguaje y la conciencia, bajo la cultura secular. Lo sagrado ya no forma parte del entretejido de la vida cotidiana. Menos aún el suelo que pisamos?.
?La Tayka Pachamama dice Rocha Franz- es la que nos da la vida, pero también es quien la quita. Es quien nos provee y nos deja en el desamparo, la que ofrece prados y valles, pero también volcanes y terremotos. Tiene dos caras, una de ella llena de flores y panes, la otra con culebras y sapos. En esta dualidad se desarrolla la existencia del hombre americano. Por eso se acepta a la muerte con la misma naturalidad como se acepta a la vida. El hombre como un ser terrenal, con un lugar y un tiempo definido, nos remite también a una hermandad cósmica. Nuestra nave madre nos lleva y a la vez nos salva, a lo largo de su eterno viaje por el Universo?.
Existe en otras culturas el concepto de la Tierra como un ser vivo Gaia para los griegos-, pero es en América donde cobra una relevancia esencial al estar presente en la variedad de los actos humanos. Es aquí donde nacemos, crecemos y aquí dejamos los huesos, en la misma placenta
Residentes vallistos y Puneños también tienen sus festejos
Hoy comienza el culto a la Pachamama, una de las expresiones culturales más relevantes y coloridas del norte argentino. Los tradicionales convites en honor a la Madre Tierra se extenderán durante agosto en los Valles Calchaquíes, la Puna y muchos otros puntos de la provincia.
Las costumbres vallistas y andinas dan su impronta a una celebración que año tras año cobra mayor importancia en Salta y a nivel nacional.
Uno de los precursores de esta revalorización de las raíces andinas es el Centro de Residentes Vallistos y Puneños, que funciona en Salta capital. No sólo aglutina a quienes emigraron de los Valles Calchaquíes o de la Puna, sino que atesora costumbres ancestrales, propias de una particular cosmovisión del mundo en la que la Madre Tierra ocupa el lugar central. Al frente del Centro se encuentran Severo Báez y Rafaela Gaspar, copleros de alma que trajeron la pureza de las costumbres de la región a la ciudad de Salta, que se convirtió en su hogar desde hace ya 40 años. Hoy el homenaje estará encabezado por un numeroso grupo de copleros y paisanos de toda la provincia. La mayoría de ellos debieron abandonar sus pueblos de origen, mas no sus raíces ni costumbres. Los preparativos comenzarán a las 10 en el Centro (José Echeñique 1074, villa Primavera) y la ceremonia central en honor a la ?Pachita?, como la llaman cariñosamente, será a las 14, previa bendición de un sacerdote y un gran almuerzo criollo.
Desde las 11 se podrá degustar comidas tradicionales, como locro, guiso de quinoa, asado guateado, tamales, mote con queso, machorra y calapurca, entre otros.
Habrá además rondas de copleros y bagualeros, guitarreadas y un gran patio criollo. Actuarán El Negrito Alegre, Marcelo Báez, Los Hermanitos Herrera, Néstor Saavedra, el Colla Tula y los reconocidos Bagualeros del Norte.
La apertura oficial del mes de la Pachamama se realizará hoy en San Antonio de los Cobres, desde las 10 en la Plaza de la Cultura Andina.
Allí se entregará a los presentes el tradicional ?yoki? y actuarán el Coya Pedrito, Sikuris, Las Voces Andinas y Savia Eterna.
Por su parte, los actos centrales de la XVIII Fiesta Nacional de la Pachamama serán el próximo sábado a las 15, con la participación de comunidades collas y distintas etnias de la provincia. Habrá danzas y música de sikuris, coplas y bailes autóctonos de las distintas etnias. Las actividades se desarrollarán en la Estación Belgrano. A las 20, en tanto, se llevará a cabo la 7º edición de Festi Pacha, con música y danza folclórica en el Mercado Artesanal. El mes en honor a la Madre Tierra finalizará el 31 de agosto, con una colorida ceremonia de cierre del mojón en Tolar Grande.
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