Tenemos una lectura a nivel nacional muy buena porque logramos instalar el Frente Amplio Progresista y particularmente la figura de Hermes Binner en la cancha grande. No fue solamente una posición testimonial, que era lo que queríamos superar, sino que nos plantamos como una alternativa real para disputar con los otros sectores políticos mayoritarios.

Pudimos demostrar que podíamos ser un espacio a la izquierda del bipartidismo. Más allá de la cantidad impresionante de votos que sacó el oficialismo, nuestro resultado fue bueno, lo que indica que particularmente a la izquierda del gobierno hay un espacio importante de la sociedad que busca representación política.

A nivel local teníamos el objetivo de ser la lista más votada después del oficialismo y lo cumplimos. Nos hubiera gustado sacar unos votos más pero el objetivo se cumplió y nos deja con una plataforma hacia octubre bastante buena, con posibilidades de seguir creciendo.

RP.- ¿Creés que pueden ampliar la cantidad de votos en octubre?

En La Plata se da la particularidad de que el oficialismo no hizo una elección abrumadora. En otros lugares, los intendentes que buscaban renovar su mandato han sacado el 50 o el 60 por ciento de los votos y Pablo Bruera apenas superó el 30.

Con lo cual, hay casi un 70 por ciento de la ciudadanía que votó alternativas distintas al oficialismo y se ve un espacio de disputa bien grande. A ese sector es al que vamos a ir a buscar los nuevos votantes.

Concuerdo con muchos compañeros y compañeras del Frente en que estamos lejos de haber llegado al techo con este porcentaje de 8 puntos que sacamos en la boleta distrital. Es solamente el piso y tenemos posibilidades infinitas de seguir creciendo.

RP.- ¿Creés que los sectores que pueden terminar acercándose a ustedes son los que votaron a Sergio Panella o Javier Mor Roig?

Sí, seguramente. Esos son espacios más cercanos a la figura de Luis Malagamba, que viene de extracción radical y es un tipo muy respetado dentro de la UCR y la Coalición Cívica. Más allá de las diferencias que lo llevaron a separarse, para el votante radical y muchos militantes es alguien muy respetable por su figura intachable y por su honestidad siendo concejal, defensor del Pueblo o ahora como senador.

Seguramente esos sean potencialmente los espacios más cercanos pero nosotros tampoco nos desentendemos de otros votantes que quizás eligieron otras alternativas el 14 de agosto pero que pueden mirar al Frente Amplio Progresista como un sector serio y con capacidad de gestión.

RP.- ¿Dónde hicieron la elección más fuerte y cómo van a trabajar para fortalecerse en los sectores donde menos votos sacaron?

El balance todavía está en proceso, estamos analizando mesa por mesa y circuito por circuito.

La primera lectura que tenemos es que en el casco, en City Bell y Gonnet es donde hemos tenido mejores resultados. Tampoco nos fue tan mal en algunos barrios porque logramos a través de mi partido y del movimiento Barrios de Pie una inserción territorial bastante interesante. De todas maneras, evidentemente es ahí donde tenemos que fortalecer la campaña y llevarla mejor.

RP.- Teniendo en cuenta la relación que tuviste con el espacio de “Pino” Solanas, ¿cómo viste la elección de Proyecto Sur?

Nosotros impulsamos la candidatura de “Pino” a presidente de la Nación el año pasado y formábamos parte de Proyecto Sur hasta que él decidió abandonar esa candidatura y volcarse a disputar la Capital.

Hacia adentro del movimiento, manifestamos que no estábamos de acuerdo con esa decisión e igual la acatamos. Acompañamos a “Pino” en la Capital en las elecciones a jefe de Gobierno, pero planteamos que era necesario plantear una alternativa superadora a eso buscando otro referente como candidato a presidente.

Ellos propusieron que concluyéramos con el Gen y con los socialistas y estuvimos de acuerdo. Empezamos a caminar ese sendero, se constituyó el FAP y cuando eso estaba resuelto, “Pino” decidió romper con ese acuerdo. Obviamente, nosotros no estuvimos de acuerdo con esa decisión.

Creo que el resultado de Alcira Argumedo era más que esperado en ese contexto. Pero son cuestiones que ameritan ser discutidas con los compañeros y compañeras con los que caminamos durante buen tiempo por la candidatura de “Pino”. Debemos debatirlo sinceramente y fundamentalmente cara a cara porque los debates a través de los medios nunca sumaron nada.

Está planteada la necesidad de hacer un balance con ellos y hay que esperar el momento para poder hacerlo cara a cara.