Atendió el llamado de Mauricio Pellegrino y escuchó con atención. “Te quiero llevar a Independiente”, le comentó, sin rodeos, el técnico. Jorge Ortiz no titubeó y marcó de inmediato el teléfono del presidente de Lanús, Alejandro Marón, para mantenerlo al tanto del ofrecimiento y evitar un potencial foco de conflicto. Al volante central le queda un año más de contrato con el Granate, aunque la posibilidad de ser transferido al Rojo lo moviliza. Guillermo Barros Schelotto lo considera una pieza fundamental, pero el Marciano, quien ayer cumplió 31 años, no quiere desaprovechar la posibilidad de volver jugar en un club grande (tuvo dos pasos fugaces por San Lorenzo).

En Lanús no están dispuestos a dejarlo partir por una cifra módica, pero sí hay predisposición para sentarse a negociar. De hecho, Independiente ya ofreció u$s 750.000 y los directivos del Granate contestaron que pretenden, como mínimo, u$s 1.250.000. “El técnico nos pidió al Marciano Ortiz y nos parece un jugador muy interesante. Tiene experiencia y sabemos que, si logramos traerlo, no le va a pesar la camiseta. Queremos cumplirle al técnico, pero no vamos a cometer locuras. La cantidad de representantes que quieren cobrar una comisión es vergonzosa. No vamos a permitir que nadie nos pase por delante”, remarcó Pablo Moyano en Emoción Roja.

En Avellaneda confían en que el volante colabore para que el pase pueda concretarse. Aguardan que insista para que los directivos de Lanús se vean obligados a bajar sus pretensiones. “Jorge está muy entusiasmado con la posibilidad de ir a Independiente. Primero habrá que acordar una cifra, siempre teniendo en cuenta la voluntad y el deseo del jugador. Para él, jugar en un club tan grande sería cumplir un sueño”, comentó el representante del volante, Rodrigo Vilariño.

Ortiz también tiene una oferta del fútbol de México, pero ya decidió: su prioridad es Independiente.