No son solo una cara bonita. La tendencia muestra cómo las ex reinas de la Vendimia pasan a la función pública. La última incorporación a Casa de Gobierno es la ex reina de Las Heras, Gisela Gaviola, la bella morocha quien se animó a romper con el tradicional rol de la reina y posó en el 2003 cubierta de hojas de parra.

La actual modelo publicitaria, sin embargo, viene desempeñándose desde hace cuatro años como recepcionista y secretaria privada de Mendoza Fiduciaria y en esta oportunidad reemplazará a la secretaria privada del ministro de Agroindustria, Marcelo Barg, quien aclaró:

"Gisela es una laburante que trabaja más de 12 horas por día en distintos trabajos. No ingresó al Estado de la noche a la mañana sino que viene trabajando en Mendoza Fiduciaria, el fideicomiso de administración y asistencia financiera vitivinícola la cual depende de Agroindustria".

El funcionario no se mostró a gusto con la cobertura mediática de su incorporación y pidió: "No se puede banalizar o hablar despectivamente de una laburante. Me parecieron despectivas y casi discriminatorias algunas coberturas", agregó Barg, quien aclaró que la modelo no desempeñará acciones políticas sino administrativas.

De esta manera, Gisela se sumó al grupo de ex reinas que dejaron la corona para trabajar como empleadas públicas y cuya tendencia explotó con la ex reina nacional de la Vendimia, la santarrosina, María Flor Destéfanis, quien seguidora de Francisco Pérez, pasó de trabajar en Protocolo del Senado, con Carlos Ciurca, a desempeñarse como directora del Centro de Congresos y Exposiciones. Pero Gisela y María Flor no son las únicas en la gestión Pérez. La ex reina de San Rafael, Carla Rivas (22) trabaja como secretaria privada del gobernador. La joven contadora maneja los papeles del gobernador y ayuda en las tareas administrativas.

En el área de Relaciones Institucionales de la OSEP, se desempeña Stela Maris Laborde quien fue electa reina nacional en 1974. Es asistente social y coordina las vinculaciones de la obra social con el resto de las instituciones.

El vicegobernador Ciurca, también tiene sus reinas. Después de que se desempeñara como jefa de Protocolo de Celso Jaque, Marcela Gaua, pasó a la Legislatura donde también está a cargo de esas tareas junto a la esposa del titular del IPV, Marisa Parisi.

En el Ministerio de Turismo y hasta la gestión anterior trabajaba la ex reina nacional de la Vendimia del 2004, Dana Otero. Sin embargo, la ex reina hoy trabaja con el intendente de Rivadavia (comuna por la que fue coronada) Ricardo Manzur en el área de Protoloco junto a la ex reina Yanina Boiteux. Así, buena parte de las ex sobernas han quedado fijas, generalmente en Protocolo, en sus municipios. Es que además de que existe un contrato anual con la comuna, muchas logran quedar en planta por su performance frente a las tareas encomendadas.

Una tendencia generalizada

Marinés Babuggia, ex reina nacional de 1997 y actual titular de la Comisión de Reinas Nacionales de la Vendimia, se desempeñó en la Dirección de Asuntos Legales de Guaymallén durante la gestión de Juan Manuel García; al igual que Carolina Cucuzza en el área de Comunicaciones; Paola Mercado, en Turismo y María Magdalena Iaconetti en Planificación de ese departamento. Jorgelina Cucato, virrerreina en 1998, condujo Turismo de General Alvear mientras que en Junín, asumió en Cultura, Lorena Arancibia. Lorena Lorca fue una fiel trabajadora en Capital.

Hubo, no obstante, quienes llegaron a cargos políticos como Hilda Rosa Quiroga, electa en 1985 quien llegó a presidir el Concejo Deliberante cuando el ex intendente Raúl Rodríguez se ausentaba de Malargüe.