Así se expresaron los concejales Maya Vena (GEN); Santiago Zaffora (FpV) y Pablo Yannibelli (Azul para el Desarrollo) al momento de referirse al trabajo que está realizando la comisión conformada para modificar la ordenanza de Ordenamiento Territorial para el Partido de Azul.
En diversas reuniones ampliadas a diferentes actores e instituciones de la comunidad, los concejales azuleños comenzaron a delinear la primera etapa del tratamiento y análisis de dicha ordenanza con el objetivo lograr una normativa actualizada respecto al ordenamiento territorial de Azul.
En este sentido, el edil de Azul para el Desarrollo, Pablo Yannibelli remarcó que “tuvimos un recorrido importante con las instituciones más representativas en la temática, con las comisiones barriales y con vecinos que han expresado su preocupación o conocimiento en el tema. Hemos terminado la primera etapa del diagnóstico, ya que la idea es generar una minuta con los que han participado, que ellos nos den el visto bueno sobre los puntos que se han planteado y así poder hacer un primer informe”.
“Vamos a empezar a convocar a instituciones y vecinos”
Respecto a la modalidad de trabajo utilizada en el marco de la comisión conformada, la concejal del GEN Maya Vena resaltó el acompañamiento de la Facultad de Derecho y la conformación de talleres para darle dinamismo y amplitud a la labor. “En realidad, habíamos planteado en principio encuestas para algunas instituciones que nos interesaba conocer su opinión, y en una alianza estratégica que hemos realizado con la Facultad de Derecho, pensamos que la mejor manera es a partir de talleres”.
La concejal explicó que dichos talleres comenzarán la semana próxima y tienen por objetivo “conocer cuáles son las necesidades que tienen respecto al trabajo que estamos realizando nosotros” y agregó que “vamos a empezar a convocar a instituciones y vecinos para que empiecen a participar de estos talleres y sumarlos a este diagnóstico que estamos haciendo para poder ver de qué manera recabamos las mayores visiones posibles de la ciudad”.
“Ordenanza vital a la hora de pensar nuestra ciudad de cara a los próximos 10 años”
Por su parte, el concejal del Frente para la Victoria, Santiago Zaffora resaltó la importancia de actualizar la ordenanza 500/80 haciendo hincapié en la participación comunitaria. “Es una ordenanza estratégica a nivel comunitario y que tiene, como eje central, la participación. Todos los que participan se muestran muy conformes porque entienden que es una ordenanza vital a la hora de pensar nuestra ciudad de cara a los próximos 10 años”.
Además, Zaffora resaltó que la ordenanza ha sufrido en estos años muchas excepciones que no permiten generar reglas claras tanto para el sector público como el privado. “Es una ordenanza que viene sufriendo excepción tras excepción y que de alguna manera va generando un ordenamiento anárquico de la ciudad con lo que ello representa en materia de inversión o desinversión y con lo que representa a la hora de generarle reglas claras a los desarrollistas, los inversores y al propio estado cuando tiene que fijar una política en materia de infraestructura”.
“La visión de los técnicos refleja la visión de nuestra comunidad”
Los concejales explicaron que la ordenanza tiene que tener un plan de vigencia de no más de diez años generando mecanismos de revisión constante. “Hay que trazar un esquema de revisión constante para ir modificando lo que las propias demandas de las sociedades van imponiendo en cada momento, eso está pensado también y se va a dejar establecido para que se pueda avanzar en una ordenanza que no sea estática sino que evolucione constantemente”.
En el mismo contexto, el concejal Pablo Yannibelli se refirió a la visión de los actores participantes de esta labor. En este sentido, manifestó que “la visión de los técnicos refleja la visión de nuestra comunidad. Algunos ven una posibilidad vinculada al turismo hasta visiones más puntuales que tiene que ver con los distintos sectores de la comunidad”. El edil explicó que hay zonas de la ciudad que tienen todos los servicios públicos pero no están desarrollados porque no están habilitadas para construirse viviendas, en cambio, otras zonas sí permiten este tipo de construcción pero no llegan los servicios de la manera en que tienen que llegar. “Estuvimos en una reunión en el Colegio de Arquitectos y lo que se planteaba era esta necesidad. Además, entendemos que las miradas no tienen que ser contrapuestas, por ejemplo, podemos tener una mirada hacía el turismo pero también rescatando lo patrimonial y que eso conviva en nuestra comunidad”, expresó “vamos a empezar a convocar a instituciones y vecinos Yannibelli.
Comentá la nota