Es una de las posibilidades que manejan los tres precandidatos a intendente del FpV -dos sciolistas y un randazzistas- que recibieron al intendente con una andanada de críticas.
El intendente de Olavarría, José Eseverri, no será recibido con un lecho de rosas en su retorno al Frente para la Victoria después de abandonar las filas del massista Frente Renovador. Los tres precandidatos que el kirchnerismo tenía hasta ahora lo dieron la bienvenida con duras críticas, y ahora analizan reconfigurar un escenario en el que una posible lista de unidad está entre las variantes. Las conversaciones aún no arrancaron y no serán sencillas, pero ninguno las descarta.
Dos sciolista y un randazzista son los que hasta ahora se perfilaban para disputar un escenario que parece complejizarse con la irrupción de Eseverri, quien si bien aún no anunció que irá por la reelección, esa es la sensación que impera entre sus allegados a dos días de abandonar a Sergio Massa.
Si bien los perfiles de los precandidatos que por ahora lo enfrentarán son bien distintos, todos comparten la juventud y la crítica al jefe comunal, de quien consideran que “abandonó la gestión municipal para dedicarse a una aventura política que fracasó”.
Del lado vinculado a la precandidatura presidencial de Daniel Scioli están José González Hueso, actual subadministrador de la delegación olavarriense del Instituto de la Vivienda, y Guillermo Santellán, concejal vinculado a la estructura del PJ a través de la conducción de Adriana Capuano. El candidato randazzista es Gonzalo Bagú, funcionario del ministerio de Interior y Transporte que conduce el pre candidato presidencial.
Existe un cuarto grupo que aún no sentó postura, y que está vinculado con el diputado bonaerense camporista, César Valicenti.
“Nosotros somos los únicos que nunca tuvimos relación política con Eseverri” dice Santellán a Diagonales, como si fuera una medalla. El concejal es el primero que admite la posibilidad de que se reconfigure el escenario dentro del FpV con la irrupción del intendente de origen radical. “Tenemos buen diálogo con los otros sectores pero habrá que ver si podemos superar las diferencias. pero no podemos descartar sentarnos a charlar”, dice.
Se planta contra cualquier posible acuerdo de unidad con el regresado jefe comunal y abre un interrogante en torno a la relación con el randazzista Bagú. Recuerda entonces que el jefe político de ese rival es quien primero mostró una puerta abierta para Eseverri.
González Hueso, recordó, también con Diagonales que el modelo al que ahora se reincorpora el intendente es el que defiende los intereses de los trabajadores. “Si quiere sumarse a defender el modelo y competir contra nosotros en las PASO, puede hacerlo. Nosotros tenemos otro proyecto para Olavarría y creemos que miles de familias y vecinos van a acompañarnos porque expresamos una opción seria, con una fuerte vocación por gobernar, experiencia y coherencia personal y política”, dijo.
También se mostró abierto al diálogo. "No podemos negar que se reconfigura el escenario, y en ese terreno quienes coincidimos en la mirada política respecto al proyecto de país tenemos que darnos la posibilidad de sentarnos a dialogar".
El randazzista Bagú ya se mostró dialoguista a través de las redes sociales. “Dialogar y gestionar es lo que vamos a seguir haciendo. Por eso en Olavarría trabajaremos junto a todos aquellos que compartan esta visión”, dijo.
Su perspectiva, no obstante, podría habilita a alguna otra interpretación diferente cuando agrega que esa relación es “con todos quienes gestionen por la ciudad”.
Los palos para a Eseverri. Por ahora siguen cruzados los brazos que pudieron haberse abierto en el FpV para Eseverri después de la formalización de su retorno en la reunión con el secretario general de la Presidencia, Eduardo “Wado” De Pedro, o tras la reunión que mantuvo este jueves en la Capital Federal con el gobernador bonaerense Daniel Scioli, en donde con la excusa de abordar temas de gestión y política pública, sin dudas recibió el visto bueno del precandidato presidencial del FpV.
Ni siquiera de parte de Bagú, hombre ligado a Randazzo, el primero en sacarse una foto con el jefe comunal olavarriense la semana pasada. “No tengo ninguna duda de que el intendente Eseverri tomó esta decisión más que por una cuestión de convicción, o de proyecto o de alineamiento político, sacando la calculadora”, dijo. Y agregó: “Uno tiene que ser claro con los principios y con las ideas que tiene, independientemente de las coyunturas electorales. No sirve decir cualquier cosa con tal de ganar, no sirve abrazarse a cualquiera con tal de sostenerse.
Fue muy coincidente con Santellán, quien lamentó la actitud del intendente porque –según su criterio- “son este tipo de hechos los que terminan ensuciando no sólo su imagen, sino la de la política toda”. El concejal del FpV calificó de “aventura política fracasada” al paso del actual mandatario comunal por el massismo.
Y casi en la misma línea, González Hueso Cuando recordó que cuando Eseverri pasó al Frente Renovador “decía que ‘había que tener coraje’ para enfrentarse al partido gobernante, pero vemos que sólo tiene valor para seguir al partido que vaya primero en las encuestas, sea cual sea”.
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