Si bien el Subsecretario de Infraestructura Hidráulica, Rodrigo Silvosa, anunció su renuncia a fines de 2017, fue aceptada por la Gobernadora María Eugenia Vidal el pasado 1° de enero.

Así fue publicado en el Boletín Oficial de este miércoles en un escueto decreto en el que, ni siquiera, le “agradecen por sus servicios”, como suele ocurrir en este tipo de ocasiones.

Tal como publicó este medio, Silvosa tuvo un importante protagonismo a lo largo del año pasado, ya que la Provincia se vio afectada por recurrentes inundaciones en varias regiones, y demandó un intenso trabajo por parte de la Subsecretaría a su cargo, que además tiene como máximo desafío la continuidad de las obras en el río Salado.

El funcionario estaba en la Provincia desde el inicio de la gestión de María Eugenia Vidal, cuando el ministro era Edgardo Cenzón, y siguió en funciones tras la llegada como titular de la cartera de Roberto Gigante.

El ministro designó al frente de la estratégica Subsecretaría de Hidráulica a Luis Jiménez, su mano derecha y quien se desempeñaba como subsecretario de Desarrollo e Infraestructura, ente que tenía a cargo el desaparecido Fondo de Infraestructura Municipal (FIM).

También se alejó del ministerio Pablo Gaytán, quien se desempeñaba como Subsecretario de Servicios Públicos, un área que quedó disuelta tras la aprobación de la Ley de Ministerios.

Pero llegó a la cartera Martín Heinrich, quien se hará cargo de la Dirección Provincial de Aguas y Cloacas. Heinrich fue hasta hace tres meses Director General de AYSA, y tiene expertise en el trabajo en barrios de emergencia y villas.

Otra de las modificaciones en la cartera conducida por Roberto Gigante es que tras la salida de  Lisandro Perotti como Subsecretario de Transporte, esa dependencia quedó bajo el mando de Mariano Campos, responsable de Vialidad Provincial. 

Campos asumió como Subsecretario de Transporte y esa cartera quedó contenida por Vialidad, por lo tanto amplió su radio de acción y no perdió injerencia sobre el área que comandaba hasta entonces.