Señaló que el FPV-PJ debe contribuir al quórum y aludió a Fernando Musella sobre los “fantasmas”.
En la cámara baja solo restan dos sesiones para culminar el año parlamentario. Si bien algunos legisladores ya barajan informalmente extender el periodo, ayer se levantó la sesión dado que no estaban presentes los 21 diputados necesarios -el quórum- para iniciarla.
Pasadas las 13.00, en el recinto se encontraban 18 legisladores, tanto del oficialismo (FPV-PJ) como de la oposición (FCS-Cambiemos) y de los bloques unipersonales.
El presidente de la cámara, Marcelo Rivera, consultó el número de presentes y se esperó a completar el quórum. Se sumó Macarena Herrera (Renovación Plural Peronista) a los presentes. Con ella se alcanzaban los 19 y solo restaban dos para iniciar la sesión.
Esperaron un tiempo más pero no se llegaba al número. Transcurría el tiempo y Rivera tomó la determinación de levantar la sesión.
Curiosamente, dos minutos después, ingresaron al recinto cuatro diputados de la Renovación Plural Peronista.
Entretelón
Por su parte la presidenta del FCS-Cambiemos, Marita Colombo, consideró: “Hay un apuro por levantar la sesión porque, evidentemente, hay temas que generan inquietud al oficialismo y que teme que sean planteados en el recinto. Están luchando contra sus propios fantasmas”.
A la vez, Colombo dijo: “Hubo un mensaje claro, que nosotros juntáramos el quórum”. Deslizó así que lo sucedido con el exministro Chico es “prueba clarísima de cómo se paralizó la cámara durante tres semanas consecutivas”.
En el caso del levantamiento de la sesión de ayer, Colombo evaluó: “Tal vez está relacionado con que la semana pasada se planteó que se podría convocar a un exfuncionario de Camyen, que habría recibido amenazas de muerte. Tal vez esos son los fantasmas que se agitan en el oficialismo y que impiden contribuir en quórum para que la sesión se lleve adelante”.
Finalmente, Colombo indicó que se iniciaron conversaciones con algunos senadores para prorrogar de 30 días las sesiones.
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