Neuquèn.-El gobierno provincial destinará unos 3000 millones de pesos en dos años para la construcción de 3725 viviendas en toda la provincia, lo que permitirá dar un envión al sector, que muestra una fuerte caída de la actividad en lo que va del año.

El plan de obras de la Provincia incluye las 986 casas que ya se entregaron en 2016, las 1027 que están en ejecución, las 500 nuevas viviendas que fueron licitadas y las 1241 que se encuentran en proceso de ser licitadas.

Marcelo Sampablo, titular del Instituto Provincial de Vivienda y Urbanismo (IPVU), resaltó que la inversión es “un impulso importante para reactivar la construcción en la provincia”, pero admitió que “para resolver el problema del déficit habitacional hay que hablar de números más importantes”, y que los mismos deben venir de la mano del sector privado.

El funcionario reconoció que “la inversión en la construcción de unidades habitacionales en la provincia de Neuquén en este momento está por encima de las realizadas en los últimos años”.

“Para el año que viene se presupuestaron obras por unos 2200 millones de pesos, que se suman a una cifra similar de este año”, indicó.

Las obras fueron financiadas con fondos propios y de Nación, articuladas con cooperativas de viviendas y los municipios.

A esta cantidad hay que sumarle las 166 casas que ejecuta la Agencia de Desarrollo Urbano Sustentable-Instituto Provincial de Vivienda y Urbanismo (ADUS-IPVU) en distintas localidades.

El financiamiento también alcanza para obras de urbanización como aperturas de calles e infraestructura de servicios.

El parate económico nacional pegó de lleno en el sector de la construcción: la venta de insumos cayó un 17% el mes pasado. El aumento de los precios, cercano al 30%, fue uno de los motivos de la caída.

Las dudas de los inversores y la necesidad de las familias de hacer un colchón para enfrentar la crisis fueron los otros.Sampablo reclamó la necesidad de reactivar “los créditos hipotecarios”, como el Procrear, para que las familias neuquinas puedan construir sus vivienda. Señaló que las refacciones y ampliaciones de las casas ya existentes son grandes movilizadores del sector, pero que en tiempos de crisis la gente prefiere ver que pasa y esperar mejores oportunidades para invertir sus ahorros.

El titular del IPVU demandó que se generen “loteos sociales” para los sectores medios de la población, lo que permitiría al organismo destinar las viviendas que construye a los sectores de menores recursos.

“La inversión en la construcción de unidades habitacionales en la provincia de Neuquén en este momento está por encima de las realizadas en los últimos años. Para el año que viene se presupuestaron obras por unos 2200 millones de pesos, que se suman a una cifra similar de este año”.Marcelo Sampablo. Titular del Instituto Provincial de la Vivienda (IPVU)

40.000 viviendas es el déficit habitacional en la provincia de Neuquén

Los valores que maneja el mercado

Recientemente desde el Colegio de Arquitectos de Neuquén señalaron que se registra una marcada merma de la cantidad de proyectos que ingresan a esa institución para encarar nuevas construcciones.

El presidente del Colegio de Arquitectos de Neuquén, Diego López de Murillas, indicó que construir un metro cuadrado en la ciudad cuesta entre 1000 y 1200 dólares, por lo que estimó un promedio de 20.000 pesos por cada metro cubierto. Según aclaró, en la misma época del año pasado, construir salía un 30% menos.

“Los costos son muy relativos, dependen del tipo de construcción, el tipo de suelo y la cantidad de metros cuadrados que se construyan”, explicó el profesional, y aclaró que en el mercado también se manejan dos valores: un valor por la obra que paga impuestos y otra en negro, que “si bien se trabaja para solucionarlo, se da bastante en la región”.

Aunque estas variables hacen difícil establecer una comparativa con otras localidades de la región, López de Murillas aseguró que “a medida que te alejás de los centros comerciales que proveen materiales, van aumentando los costos”. En ese sentido, aseguró que edificar en lugares menos accesibles como Mari Menuco o Añelo es más costoso que en la capital.