Hace pocos días se dio a conocer la instalación de un contenedor para recibir desechos domiciliarios en la zona de la estación de trenes. La instalación de una ‘estación de reciclado’ en un punto estratégico, “busca impulsar y promover en las gestiones locales instancias de aprovechamiento y valorización de los materiales post-consumo”, destacaron desde Acumar. 

La incorporación de este receptor de basuras es producto  de un trabajo en conjunto del organismo nacional y el municipio local.

Según informó la Secretaría de Gobierno, a cargo de Valeria Ríos, el contenedor de Acumar es vaciado por la Cooperativa ‘Cañuelas Recicla’. Además, dijo que “ya se implementa la separación de origen en Gobernador Udaondo y Uribelarrea. En una nueva etapa se extenderá a Vicente Casares. Y nuestra intención es que este año se haga en todo el partido”.

La consigna es generar un cambio de hábitos en relación al cuidado de nuestra casa y dirigida a todas las personas que viajan en esa zona de las calles Alem y Libertad, ya sea con los colectivos o con el tren. El contenedor fue instalado en el pasaje Alem, entre la estación de trenes y la terminal de ómnibus.

En dicho lugar se pueden entregar, por cuatro bocas, siempre limpios y secos: papeles, envases tetra brik y cartones, metales, plásticos y vidrios.

La zona mencionada es recorrida a diario por mucha gente que consume bebidas y alimentos sólidos, dándoles muchas veces un destino incorrecto a los envases y envoltorios. Hay tachos de basura en la terminal, pero se trata de implementar una suerte de campaña de concientización, educación y reciclado en una zona de alto tránsito.

En los grandes conglomerados urbanos, cada persona genera a diario entre un kilo y un kilo y medio de basura, dependiendo del poder adquisitivo. En ese contexto, alrededor del 15 por ciento del peso de cada bolsa ‘convencional’ está dado por plásticos y embalajes; los metales representan otro 12 por ciento y los empaques de papel o cartón, el 20 por ciento del peso.

Según especialistas de higiene urbana, el éxito de un programa de este tipo depende en un 90 por ciento de la conducta de la gente y de que se tome conciencia de la posibilidad que brinda para bajar los niveles de contaminación.