Sucede que Apaza supo hacerse un nombre sólo en los ámbitos judiciales, ganado a fuerza de una actuación profesional digna de la envidia de los jóvenes (y no tanto) que recién empiezan a transitar en el difícil ambiente del Derecho. Con vuelo económico propio, se mostró distante de la política partidaria, aunque siguió con atención y rigurosidad la gestión de su amigo Walter Barrionuevo. Es más, fuentes consultadas por Pregón para develar el anonimato del actor en cuestión, explicaron que Apaza es un hombre de extrema confianza del Gobernador y que se venía desempeñando -en silencio- como una especie de jefe de asesores. Quizás por ello sabe, al dedillo, las fortalezas y debilidades del gobierno detalles que guarda -con la típica prolijidad de un escribano- en su estudio de avenida Humberto Martiarena. "Vicente les tiene contadas las costillas a todos, porque su frase de cabecera es una frase de Perón que dice ´con los dirigentes a la cabeza o con la cabeza de los dirigentes´, imaginate cómo se maneja", dijo la misma fuente frotando sus manos en clara señal de expectativa.

Sin embargo, la pregunta que más transitó en los ámbitos políticos fue la razón que llevó a Barrionuevo a tomar esta medida. Aquellos dirigentes con cierto trato, pero sin acceso a la oficina privada, se animaron a especular que la decisión había sido impuesta por la mesa chica del PJ en un intento por condicionar al titular del Ejecutivo. Los más allegados explicaron, en cambio, que la disposición respondió únicamente a una iniciativa del Gobernador, quien creía conveniente realizar un giro de timón, hacer visible a Apaza y asignarle a él la responsabilidad -para nada simple- de controlar e intensificar la gestión diaria del Estado. La orden parece clara: Ajustar los tornillos y conducir, de ser necesario, "garrote" en mano. Por lo pronto, Apaza ya tendría en carpeta un plan de acción de corto y mediano plazo definido con Barrionuevo -almuerzo en El Carmen de por medio- y estaría a la espera de la orden de largada para sumarse a la gestión pública, sin restringir tiempos, horarios, y una personalidad básicamente "hostil e inflexible".

NOCHE BAJO CONTROL

Después de un año, el Ejecutivo decidió avanzar en la reglamentación de la Ley Nº 5597 que establece, en otros aspectos, el cierre de los boliches bailables a las 4 de la mañana.

La medida se tomó por dos razones (que aparecen con gran aceptación de la gente, según sondeos de opinión). Por un lado, minimizar los riesgos que acarrea el consumo masivo de alcohol y, por otro, acentuar la responsabilidad en los padres y su tarea de cuidar a los hijos.

De esta manera, lo que parecía una batalla perdida por el Ejecutivo, se convirtió rápidamente en un nuevo marco de actuación para la noche jujeña. Al parecer, desde San Martín 450 habrían adoptado la estrategia del "boxeador herido", distrayendo al oponente y esperando el momento justo para derribarlo de un golpe certero. Fuentes cercanas a la Cámara de bolicheros dijeron que sus integrantes aún están digiriendo el estacazo, aunque anticiparon que no se quedarán de brazos cruzados.

Por lo pronto, desde el Ministerio de Gobierno y Justicia esperan -listos- cualquier reacción que afecta la decisión de empezar a poner orden en la noche y empezar a cambiar las reglas de juego, evitando, por ejemplo, las muertes causadas por accidentes de tránsito a razón de los altos niveles de ebriedad. "La diferencia entre hoy y hace un año -confiaron altos funcionarios- es que la discusión mediática planteada en provincia de Buenos Aires nos da la razón y de ahí no nos vamos a mover".

AL QUE LE QUEPA EL SAYO...

Si hubo un hecho de especial significancia para Jujuy esta semana, fue la apertura de Annuar Shopping, primer emprendimiento de esta naturaleza en Jujuy.

El evento, que había generado gran expectativa en la ciudad, se hizo realidad el día miércoles, partido de eliminatoria de por medio. La inauguración se constituyó, básicamente, en un espacio de encuentro de distintos actores sociales, empresariales y políticos, aglutinados bajo la misma premisa: La necesidad de invertir en la provincia y alentar a aquellos que así lo decidieran.

En los discursos de rigor se escucharon frases de apoyo y felicitaciones de los presentes, pero no fueron pocos los que comentaron los dichos del Primer Mandatario: "Qué bien que le vendría a Jujuy un par de locos más", en clara referencia a la vocación emprendedora de Annuar Jorge. Sabiendo que en política nada es gratuito, más de uno creyó ver allí un tirón de orejas para el resto del sector privado y una señal de que es necesario ajustar algunas reglas de juego. ¿Se vendrán cambios en materia de obra pública y gestión? En los próximos días se conocerá, seguramente, la respuesta.