La medida de fuerza que impulsaron los gremios del transporte rigió entre las 4 y las 7 de la mañana de este jueves, y paulatinamente comienza a normalizarse. La medida es contra el impuesto a las Ganancias y en reclamo de un bono de $4000. Complica el traslado de miles de trabajadores, sobre todo de aquellos que ingresan bien temprano a sus empleos.
No será un paro total, pero habrá asambleas simultáneas de trabajadores del transporte terrestre, aéreo y marítimo de 4 a 7 de la mañana, que afectarán los servicios prácticamente por completo dentro de esa franja horaria.
La medida se sentirá en Santiago del Estero, pero también en ómnibus de larga distancia, vuelos internacionales y de cabotaje.
Uno de los impulsores de la protesta, el secretario de la CGT opositora, Hugo Moyano, ya avisó que la medida podría extenderse más allá de las tres horas de la madrugada. “Cada uno lo aplica según la actividad en la que se desarrolla. Hay áreas que si se paralizan tres horas a la mañana después no pueden continuar. Cada actividad lo ha planificado y lo va a aplicar de acuerdo con su rubro”, dijo anteriormente.
Antonio Villalba, secretario General de la UTA filial Santiago del Estero, explicó que “Santiago se une a la asamblea por lo que los colectivos no saldrán de 4 a 7 de la mañana de este jueves”.
“Es algo anunciado con mucha anticipación por lo que nuestros usuarios ya sabían de esta medida. Sólo afectará tres horas y descarto que se vaya a extender por más tiempo”, remarcó Villalba.
Asimismo recordó el objetivo de la asamblea.
“Vamos a hablar sobre el impuestos a la Ganancia y vamos a pedir un plus para que nuestros trabajadores pasen una Navidad como corresponde”, agregó Villalba.
Todavía mantienen la esperanza de que Cristina anuncie una suba del mínimo.
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