El gobernador pronunció su último discurso al comienzo del año parlamentario en la Legislatura y habló como precandidato.
En su último año de mandato como gobernador, José Manuel de la Sota abrió ayer el período 137 de sesiones ordinarias de la Legislatura con un repaso de su actual gestión y críticas al Gobierno nacional, para finalizar ratificando su decisión de presentarse como candidato presidencial en las próximas elecciones.
En un discurso de casi dos horas, el mandatario no aludió a la fecha de convocatoria de elecciones para los comicios provinciales, definición que era aguardada con expectativa por la oposición. Entre los nuevos anuncios, el principal fue la implementación del boleto obrero y social. Sí hubo reiteraciones sobre los avances y próximas inauguraciones de obras viales en particular.
De la Sota ingresó al recinto alrededor de las 11,15 bajo un cerrado aplauso de la bancada oficialista y de La Militante, la agrupación juvenil delasotista que copó las graderías del recinto y aplaudió junto a otros adherentes al gobernador una veintena de veces.
La sesión fue presidida por la vicegobernadora Alicia Pregno y además del gabinete estuvieron presentes en el recinto el titular del Tribunal Superior de Justicia, Domingo Sesín, el intendente de Córdoba, Ramón Mestre y legisladores nacionales, entre otros. Estuvo ausente el precandidato a gobernador, Juan Schiaretti, por el fallecimiento de su exesposa y madre de sus hijos.
Tras definirse como un “sobreviviente de la generación de los ’70” De la Sota arrancó su discurso con expresiones sobre la forma de entender la política. “No creo en los enfrentamientos patoteros, ni en el insulto, ni la critica despiadada para sacar un beneficio personal”, afirmó, Tras cartón sostuvo que el “diálogo ha sido y es una constante en su gestión”.
Después De la Sota ingresó en el análisis de la realidad nacional y se refirió a la muerte del fiscal Alberto Nisman, que calificó como “un quiebre, que marca un antes y un después” en la República “Hay sensaciones en el pueblo, y pedidos de cambios y respuestas”, y consideró que “lo que está en juego es nada menos que la confianza”.
Al avanzar en sus consideraciones sobre el caso Nisman, advirtió : “Perder la confianza equivale a perder el país”.
Luego entró de lleno en el repaso de su gestión y dijo que su Gobierno invirtió en la construcción de 472 escuelas y concluirá con 513, lo que provocó el primer aplauso.
Aludió al plan de desarrollo del noroeste y anunció un proyecto de ley para que todos los alumnos de escuelas primarias, públicas o privadas, localizadas en esa región provincial, reciban un premio de 15 mil pesos al momento de egresar.
También De la Sota destacó lo que consideró avances en transparencia de la gestión pública, en los programas de empleo (en particular el Programa Primer Paso que a partir del 1 de julio tendrá una asignación de 2.500 pesos mensuales) para luego remarcar que en materia de turismo, la Provincia se encamina a una temporada récord con cinco millones de turistas.
En lo referido a seguridad, anunció que el fiscal general, Alejandro Moyano, elevó como candidatos a jefe y subjefe de la Fuerza Policial Antinarcotráfico a Martin Norberto Berger y Francisco Salcedo, respectivamente. Prometió que esa fuerza comenzará a operar a fines de marzo, con 200 efectivos iniciales. También aseguró que comenzó a aplicarse en los ascensos policiales de fin del año pasado, la ley de control ciudadano de la policía, con audiencias públicas.
Tras resaltar otras acciones de su gestión, entre ellas la reforma política, dedicó la parte final de su discurso al año político y su aspiración presidencial. “Argentina necesitará que el próximo Gobierno nacional tome medidas urgentes y claras”. Afirmó que deben apuntar a “detener gradualmente la inflación, para generar empleo genuino y digno, para terminar con el clientelismo denigrante y brindar ayuda solidaria a las familias en extrema pobreza”.
También, sin nombrar a la casa Rosada, dijo que el próximo Gobierno deberá “enfrentar cara a cara a la inseguridad, a la violencia, el narcotráfico, la impunidad y la corrupción”.
“Ese próximo Gobierno es el que deseo llevar adelante, aportando mi experiencia, mi voluntad y humilde capacidad, si el pueblo argentino me vota para hacerlo”, afirmó.
Cerró su mensaje exhortando por una “patria de hermanos, en paz y con justicia”.
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