La hidrovía Paraná-Paraguay constituye un corredor natural de transporte fluvial que se extiende a lo largo de los ríos del mismo nombre.

Este canal natural permite la navegación continua entre los puertos de Paraguay, Argentina, Brasil, Bolivia y Uruguay. Este factor lo convierte en herramienta estratégica para el desarrollo y sostenimiento de la economía nacional.

Según estimaciones, entre 10 y 11 millones de toneladas de productos nacionales se mueven anualmente por la hidrovía Paraná-Paraguay. Además, con casi 3.000 embarcaciones, nuestro país tiene una de las flotas de este tipo más grandes del mundo.

Referentes del sector, resaltan la necesidad de «pensar a futuro» estableciendo estrategias y políticas a largo plazo que garanticen su funcionamiento; un programa integral, ambientalmente sustentable.

El transporte fluvial es más eficiente, pues insume un menor consumo de energía por carga (eficiencia energética), por lo que es considerado un sistema más sustentable y seguro.

En este sentido, referentes del sector explican, como ejemplo, que un convoy de 16 barcazas puede trasladar alrededor de 26.000 toneladas de productos; un volumen que necesitaría de 1.050 camiones de carga.

LARGO PLAZO

«Hay que ver a futuro y ser creativos a largo plazo ante escenarios (por el clima) que se dieron en la principal vía de transporte, a fin de preservarla. La sequía fue inédita en los últimos 100 años», expresó el vicepresidente de la Cámara de Armadores Fluviales y Marítimos (Cafym), Juan Carlos Muñoz, respecto a un plan a largo plazo, que considere todas las variables.

En tanto, el director de Proyectos Estratégicos del Mopc, el economista Jorge Vergara detalló que tres empresas continúan trabajando en los dragados del río Paraguay, que se encuentra en un 50 por ciento de avance y que los trabajos en el río Paraná iniciarán en las siguientes semanas. De esta forma, se busca asegurar su funcionamiento para las embarcaciones.

De acuerdo a estudios, Paraguay envía alrededor del 70 por ciento de sus productos a través de este sistema hídrico natural, siendo la soja, sus derivados y la carne las principales mercaderías transportadas.

En tanto, el presidente de la Unión de Gremios del Paraguay (UGP), Héctor Cristaldo señaló que el estado de la hidrovía afecta a todo el país, ya que tiene una directa relación con la competitividad de los productos nacionales. Sobre el punto, sostuvo que se debe establecer una línea de trabajo y no depender de las lluvias para su funcionamiento, y agregó que hasta ahora no hay nada estructurado ni concreto al respecto.

IMPACTO

La grave sequía que afectó al Paraguay en los últimos meses tuvo su impacto en el funcionamiento de la hidrovía, por ello la llegada de las lluvias marcó un alivio para el sector.

El vicepresidente de Cafym, Juan Carlos Muñoz señaló que los niveles del río registran un repunte lento y sostenido tras las últimas lluvias, pero insistió en la necesidad de pensar a futuro tras tres años difíciles para el transporte fluvial.

En ese sentido, señaló que los trabajos de dragados se continúan realizando por las empresas contratadas por el Ministerio de Obras Públicas, y que es probable que se sostengan durante el invierno, ya que aún no culminan. «A corto plazo estamos recuperando los niveles», añadió Muñoz.

Por otro lado, expuso que ahora se tiene agua, pero no carga, haciendo referencia a la baja merma en la cosecha de la soja, que es el commodity principal de exportación de nuestro país.

Muñoz mencionó que la sequía comenzó en 2019 y luego se vino la pandemia, que también afectó la exportación e importación, además del actual conflicto entre Rusia y Ucrania, que aumenta los costos del petróleo. Sin embargo, aseguró que el flete fluvial no subió mucho en estos tres difíciles años para el sector, los que dejaron pérdidas millonarias para los empresarios.

En otro momento, el presidente de la UGP, Cristaldo, recordó que el mal estado de la hidrovía hace que los productos nacionales se vuelvan menos competitivos, y afirmó que desde hace cinco años que se venía advirtiendo de la situación preocupante, respecto a este canal natural utilizado para el comercio.

También dijo que no puede cuantificar las pérdidas del sector por la sequía, pero aseguró que «fue un golpe enorme» que afectó a todos los productos.

Finalmente, recordó que se había solicitado al Congreso 21 millones de dólares para el dragado cuando el problema del río había empezado, pero que fue aprobado mucho tiempo después, cuando la situación ya estaba más complicada.

MANTENIMIENTO

El director de Proyectos Estratégicos del Mopc, Jorge Vergara indicó que con las últimas lluvias hubo una mejora en la navegabilidad de la hidrovía, pero que siguen realizando trabajos de dragados. Informó que se registraron problemas en varios puntos donde se ya se habían realizado trabajos, pero que ahora nuevamente requieren de dragados, por ser zonas complicadas, como en el tramo Bermejo-Paraná, donde se llena de sedimentos.

«En el Bermejo teníamos problemas por el arrastre de sedimentos, ahora se está normalizando y la corriente del Paraná está restando al río Bermejo», afirmó.

Sobre el futuro y la necesidad de preservar la hidrovía, dijo que se está trabajando en un proyecto de Alianza Público Privada (APP) de dragado, balizamiento, señalización y mantenimiento del «tramo soberano» Asunción-río Apa.