Quien se quejó pidiendo esta medida fue el gobernador cordobés Juan Schiaretti, luego de que el Intendente de la ciudad de Córdoba anunciara un aumento del boleto. Frente a esto, también se sumaron el gobernador santafesino Omar Perotti y los Intendentes de Rosario y Santa Fe. Dichos dirigentes también informaron un incremento en las tarifas de transporte.

Luego de estos anuncios, el boleto en dichos distritos quedaría en 59,35 pesos. En Córdoba, piden que un boleto de 18 pesos con la excusa de que en la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires hay un 84% de los subsidios. Quieren que se reduzcan los subsidios en la Ciudad y así que el interior del país tenga un boleto con el mismo costo que en el Área Metropolitana.

En ese sentido, la medida afectará a 32 líneas de colectivo de la Ciudad que no pasan por la provincia de Buenos Aires. Como consecuencia, el jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta se verá obligado a elegir entre dos opciones: aumentar la tarifa o resignar nuevas partidas al transporte público.

Por otra parte, las líneas interjurisdiccionales -que atraviesan la Ciudad y la Provincia- continuarán bajo la administración y el control de la Casa Rosada.