Apenas unos minutos después de reunirse con Randazzo, el funcionario habló con LA ARENA, dio detalles del pedido personal que le trasladó el ministro, confirmó que la construcción de la represa requiere de la autorización del Comité Interjurisdiccional del Río Colorado, y sostuvo que "antes hay que solucionar el problema del Atuel", en alusión al incumplimiento mendocino de garantizar un escurrimiento mínimo permanente.

Barbier fue el funcionario nacional más involucrado directamente en el acuerdo alcanzado por los gobernadores de La Pampa, Buenos Aires, Río Negro, Neuquén y Mendoza, en agosto de 2008, para que esta última provincia avanzara en la fase ejecutiva del millonario emprendimiento denominado "Aprovechamiento integral de los recursos hídricos del río Grande-Trasvase del río Grande al Atuel".

Esa vez el Consejo de Gobierno del Coirco, que llevaba 14 años sin reunirse, también convino que Mendoza impermealizaría el tramo final del río Atuel en su territorio y los canales de riego, garantizándole a La Pampa un caudal mínimo de agua en forma permanente. Esa fue la moneda de cambio para el okey a Portezuelo, pero la provincia cuyana nunca cumplió con su parte porque el acuerdo no fue ratificado legislativamente.

La semana pasada, el gobernador mendocino Celso Jaque -luego de ser recibido por la presidenta Cristina Fernández en la Casa Rosada-, anunció la apertura del proceso licitatorio para la construcción de la presa a un costo de 493 millones de dólares, con financiamiento del Gobierno Nacional. Y detalló que el 12 de septiembre se conocerá el ganador de la adjudicación (ver aparte). La obra permitirá el abastecimiento de agua, la regulación del caudal del río Grande y el incremento de la energía hidroeléctrica en el sistema Nihuiles. El punto de conflicto con La Pampa es el trasvase de aguas del Grande al río Atuel.

Esas palabras de Jaque provocaron una tormenta política y una reacción del gobernador pampeano, Oscar Mario Jorge, que después de afirmar el martes que "si vamos a jugar fuerte, no habrá términos medios", tras reunirse el miércoles con Randazzo bajó el tono de voz. Aseguró que "no hay nada nuevo" con relación a la obra, remarcó que la licitación no está en marcha, y ratificó que para avanzar en ese proceso Mendoza necesita del aval unánime del Coirco. También adelantó que en los próximos días mantendrá una cumbre con Jaque y autoridades nacionales en Buenos Aires.

Diálogo.

Barbier, que a fines de 2009 observó en forma personal que Mendoza no escurría el caudal mínino convenido, fue tajante en un punto: "Hasta que la consultora no termine el proyecto ejecutivo de Portezuelo y el Coirco lo analice y lo apruebe, todo está stand-by". En aquel momento, el funcionario nacional se había mostrado esperanzado en que el año pasado llegarán tres metros cúbicos por segundo, pero ello no ocurrió.

Detalló que el ministro le pidió ayer que se comunique con el presidente del Comité Ejecutivo del Coirco, el pampeano Miguel Boyero, para que "la primera semana de febrero" el organismo se reúna en Mendoza con la intención de "retomar los canales de diálogo que habíamos abierto con el Departamento de Irrigación" cuyano.

El subsecretario nacional señaló que con la reforma constitucional de 1994 los ríos pasaron a las jurisdicciones provinciales y, por lo tanto, Nación "puede atenuar los conflictos, pero carece de poder de policía. Lo que digo es que hay que cumplir con los compromisos firmados, más allá de que estemos atrasados en los tiempos".

Con relación a la megaobra, Barbier expresó que "todo está supeditado a la presentación de los informes que se le requirieron a Mendoza. Hay una consultora que tiene que entregar los informes sobre la viabilidad del proyecto. Esos informes se estudiarán y luego el Coirco podrá autorizar el proyecto. Pero antes hay que solucionar el problema del Atuel".

El acta-acuerdo de hace dos años y medio dice textualmente que Mendoza tomará los recaudos necesarios para asegurar "un mínimo de escorrentía permanente sobre el río Atuel en el límite interprovincial, hasta la concreción y puesta en marcha de las obras previstas". Pero a las palabras se las ha llevado el viento.

Reclamo de Fuchad.

Héctor Gómez, presidente de la Fundación Chadileuvú, explicó la trascendencia de una obra multimillonaria como la de "Portezuelo del Viento", en la que está embarcada la provincia de Mendoza. "El río Grande, que es uno de los tributarios más importantes del Colorado, está considerado por los mendocinos como el río más caudaloso de la provincia y que ellos no aprovechan; el Tratado del Colorado admite que Mendoza utilice una parte de las aguas del río Grande y por otra parte, ellos quieren organizar un cuarto "oasis" (riego) en la zona de Malargüe y, además, la producción de energía mediante una represa muy importante".

"Los mendocinos tienen una política clara, definida, con respecto a sus ríos, es una política de estado, que si bien es injusta con La Pampa, porque hacen lo que les dan las ganas con los ríos interprovinciales, pero tienen tiene claramente la decisión, que es lo que nos falta a los pampeanos: no tenemos una política clara en defensa de los recursos hídricos".

Gómez, entrvistado por Radio Noticias, planteó: "Nos falta una política de estado, que es importante porque independientemente de quien gobierne La Pampa se determina que cualquiera que gobierne llevará a cabo los compromisos asumidos a nivel provincial. Las políticas de estado se toman en consenso de todas las fuerzas políticas, tiene que ser asumida por todas las fuerzas, debe ser fruto de un estudio y un debate por parte de todos partidos para determinar cuáles deben ser las políticas de estado".

-A raíz de lo que usted dice, ¿cree que se terminará haciendo sí o sí "Portezuelo del Viento", independientemente de la postura de La Pampa?

-En la medida que La Pampa no tenga una política de estado en materia hídrica, como también en educación o sanidad, nos van a seguir pasando las cosas que nos pasan. Si no tenemos objetivos claros y la fuerza necesaria para conseguir los objetivos, vamos a ser pasto de las fieras, en este caso de las fieras mendocinas, como ya ocurrió con el tema del Atuel. Cualquiera sea el gobierno mendocino, en épocas nefastas de los militares o con radicales, peronistas o conservadores, ellos siempre tuvieron en claro que el tema de los ríos es vital para su desarrollo.

-¿La Pampa puede frenar todo intento unilateral de Mendoza a través de Coirco, o el tema se resuelve políticamente y con la primacía mendocina por su peso específico a nivel nacional?

-Hacer "Portezuelo del Viento",desviar las aguas del Grande al Atuel como pretende Mendoza, debe tener la aprobación de Coirco y por unanimidad. La Pampa tiene una herramienta muy importante en sus manos para poder defender los intereses. Lo que pasa es que Mendoza siempre trató de soslayar el Tratado del Colorado, de hecho no lo aprobó legislativamente. No es casual esto, Mendoza no asume ningún compromiso sobre el derecho sobre las aguas que cruzan su territorio.

El titular de la Fundación Chadileuvú, también dijo que "hay algo que favorece a Mendoza: la angustia energética que tiene el país. La idea de Mendoza es hacer una represa muy importante, gran generadora de electricidad y parte de las aguas del desvío para el Atuel, les permitiría repotenciar todas las represas de Los Nihuiles".

"Nación apoya a "Portezuelo del Viento" por lo que implica en materia energética. Mendoza hizo un juicio, del que salió un compromiso de fondos por parte de Nación para financiar esa obra. Lo que está en discusión ahora es qué está haciendo Mendoza en este momento.

-Ya habría un concurso de empresas para hacer la obra, y se habla de dos firmas locales como las adjudicatarias.

-Exacto. Mendoza tiene una política de estado clara en varias cosas y pretende hacer esta licitación previa para seleccionar empresas y después llamar a licitación. Quiere que sean empresas mendocinas.

Participación.

El diputado provincial Carlos Pessi (Frepam) reclamó al gobernador Oscar Mario Jorge que "no continúe con su practica habitual de encarar estas peleas en soledad, sin considerar al resto de los sectores de la sociedad pampeana", al hacer referencia al conflicto con Mendoza por la construcción del complejo hidroeléctrico de Portezuelo del Viento.

Pessi indicó que la actitud de Jorge "ya la vimos el año pasado con el tema de la Promoción Industrial, y ahora nos preocupa que esta lucha de fondo por el tema de los ríos interprovinciales otra vez muestre a un gobierno en soledad y en debilidad frente a la estrategia mendocina de actuar en conjunto, defendiendo un interés que consideran 'razón de estado' en esa provincia. Parafraseando al propio Jorge con su definición de días atrás, creo que más que jugar fuerte lo que serviría en este caso es abrir el juego. La participación de la comunidad pampeana garantizaría los resultados y no una supuesta dureza en las posiciones del gobierno".

Jorge tuvo un encuentro el miércoles con el ministro del Interior Florencio Randazzo por la realización de Portezuelo del Viento, luego que el gobernador mendocino, Celso Jaque, anunciara de la apertura del proceso de licitación para la construcción de la obra que costará 493 millones de dólares.

"Le pedimos al gobernador -continuó Pessi- que esta vez sea capaz de convocar a todos los sectores políticos, que en forma unánime aprobamos el convenio del Atuel firmado en 2008 con el gobierno de Mendoza y la Nación, para encarar esta pelea en forma conjunta. Además, en La Pampa hay una historia de movilización y lucha por los ríos, instituciones reconocidas, figuras que han desarrollado una vida de trabajo en la defensa de esta cuestión, que también deben ser convocadas y participar de una estrategia firme para defender los intereses de la

provincia".

El legislador señaló: "Desde el Frepam hemos acompañado la defensa de los ríos, hemos tenido una actitud constructiva permanente, incluso presidimos la Comisión de Ríos Interprovinciales en la Legislatura, y creemos que la forma de frenar el avance de Mendoza en estas cuestiones no es otra que actuando en forma conjunta y coordinada".

"Más allá de las posturas y los resultados que se obtengan, insistimos en reclamar que se evite un procedimiento unilateral y solitario del gobierno provincial, que se autoaisla del resto de la sociedad, en este y en muchos otros temas el camino debe ser darle participación a los distintos sectores. De otra forma nunca se construirán políticas de largo plazo ni se alcanzarán acuerdos sobre temas básicos para la provincia que no dependen sólo de un gobierno ni de un gobernador", indicó.