Durante los últimos días, Diego Igor fue intervenido quirúrgicamente y le extirparon parte del intestino, además poseía lesiones graves en el hígado y el pulmón, situación que lo mantenía internado en terapia intensiva en estado "gravísimo". Cabe recordar que los médicos iban a esperar 48 horas para evaluar su evolución y reiteraron que su estado es “sumamente delicado”, pero debido a las graves lesiones murió ayer.

Igor, cumplía funciones en el Centro Integrador del Virgen del Valle y padre de familia, fue atacado salvajemente por un grupo de jóvenes del barrio Rotary, cuando salió en defensa de otro joven que estaba siendo golpeado.

El hecho ocurrió en horas de la madrugada del domingo, cuando Igor residente de ese barrio, salió en su camioneta a dejar a sus familiares, tras disfrutar de una jornada familiar.

A su regreso, en la calle Pablo Sánchez, Igor observó que un joven era golpeado por una patota y salió en su defensa. Primero, desde el interior de la camioneta habría dicho a los atacantes que dejaran de golpear al joven, aunque luego cuando intentó descender de la camioneta recibió un golpe en la cabeza con un elemento contundente.

Este golpe desvaneció a Igor, que cayó al suelo y donde fue atacado y recibió al menos ocho puñaladas.

Primera muerte

Con esta muerte ya son tres las que ocurrieron en la ciudad del Gorosito.

El primero de ellos fue Gerardo Villacorta de 29 años quien fue apuñalado en la nuca el pasado 20 de enero. El hecho ocurrió en el barrio PV de Caleta Olivia, durante una disputa recibió un puntazo en el cuello que le comprometió órganos vitales ya que tras recibir un corte en la aorta se vio comprometido el cerebro y falleció tras permanecer dos días, internado.

Gerardo recibió un puntazo con un destornillador en la zona de la nuca, mientras protagonizaba una fuerte pelea en un taller mecánico ubicado en Pasaje Quinquela y 13 de Diciembre.

De acuerdo a los primeros datos, el joven herido había ingerido alcohol en exceso y comenzó a provocar a otros muchachos que estaban en el taller. En un momento, después de un cruce de insultos, Gerardo se habría trenzado en una pelea a las trompadas con otro, cuando vino un tercero y le enterró la punta del destornillador en la nuca.

Segunda muerte

Luego el 1 de febrero, se produjo un hecho similar en el barrio Miramar. Ese día, en horas de la madrugada, Jorge Muñoz de 17 años de edad recibió tres botellazos en la cabeza y golpes para ser robado.

Muñoz fue atacado junto a un grupo de amigos el domingo a la mañana, luego que se retiraran de una fiesta de cumpleaños y el grupo se dirigía a tomar un auto en la remisería que se encuentra detrás de la escuela Nº 36.

Fuentes cercanas a la investigación detallaron que la mujer, de 16; el hombre de 21 y otras personas, increparon a Muñoz y a sus amigos y luego los atacaron. En el enfrentamiento Muñoz recibió un botellazo en la cabeza.

Al quedar herido el grupo se dispersó y lograron llevar a la víctima al Hospital Zonal, donde ingresó con una gran herida en la cabeza. Los médicos determinaron su internación en terapia intensiva debido a la gravedad de la lesión.

Desde el nosocomio trascendió que Jorge Muñoz ingresó en “estado de coma” y desde su internación permaneció con “muerte cerebral”.