Atento a la urgencia antes detallada, el nuevo presidente del consorcio Girsu, el intendente de Gaiman, Darío James -elegido ayer en asamblea- se reunirá con el gerente general de la operadora del sistema integral de reciclado, Sebastián De Pablo, para analizar posibilidades de pago de esa deuda. 

La cifra es total, más allá que el pago se hace de manera individual por municipio. Actualizado el presupuesto operativo, fijando valores a diciembre del 2023, Trelew abonará a esa fecha 634.438.456 pesos; mientras que Puerto Madryn destinará 512.284.703; Rawson deberá erogar 197.134.414; Gaiman 51.605.164; y Dolavon 21.028.353 pesos.    

Antes de proyectar obras para ampliar el horizonte operativo de la Girsu, James señaló que la prioridad será pagar la deuda con Urbaser, que al presente «está en alrededor de 300 millones de pesos. Todo el consorcio le debe a la empresa. Ese impago comprende el funcionamiento de las celdas nuevas, más el tiempo de pandemia donde no se pagó por el uso del sistema».

Mantener el sistema es complejo. El gasto para el año próximo será superior a los 1400 millones de pesos; «entendemos que es difícil afrontar esos gastos, pero no hay muchas alternativas», dijo el recientemente elegido presidente del consorcio. 

Ejemplificó que «salir del sistema y proponer un relleno propio, en el caso de Gaiman, sería retroceder en el tiempo. Recordemos que hace dos décadas, cuando el basural de Gaiman estaba infectado de bolsas, se estaba provocando un daño ecológico enorme. No tenemos otra opción, es lo que tenemos y nos ofrece buenos resultados».

ASAMBLEA

En una asamblea del consorcio concretada ayer, el intendente de Trelew, Adrián Maderna traspasó la presidencia del Girsu al titular del Ejecutivo de Gaiman, Darío James. 

Al término del encuentro, Maderna apuntó: «Sabemos que hay una situación socioeconómica muy compleja, pero hacemos el esfuerzo desde todos los lugares para tratar de mantener el servicio. Hay que trabajar en cuanto a la concientización, el costo de la basura, y la separación de origen, lo que demanda una transformación cultural».

El presupuesto aprobado contempla la operación y mantenimiento de dos plantas de relleno sanitario y la obra de la celda que se inauguró el año pasado, en la que se depositan los residuos de las cinco ciudades, y que se tiene que comenzar a pagar. Permitirá una operatividad por los próximos 8 o 10 años, aproximadamente.