Tras el cierre del local ubicado en la costanera del lago San Roque, el funcionario aseguró que el conflicto "no es de ahora" y manifestó: "No hay una enemistad manifiesta. Esto no es de ahora, viene desde que nosotros asumimos el gobierno, donde insistimos con todas las empresas que están instaladas en la zona de la costanera y que tendrán que adecuarse a las normas vigentes en la ciudad".

Pese a las explosivas declaraciones de Osmani Vázquez, propietario del comercio, Zopetti dijo que la clausura se produjo por las numerosas quejas que los vecinos de la zona hicieron por "ruidos molestos". "La postura del gobierno no es ir en contra de los empresarios. La norma prohíbe espectáculos públicos en la zona, ellos obtienen la habilitación como bar y restaurante y para realizar algún espectáculo en vivo o poner música fuerte hay que solicitar un permiso"; argumentó el funcionario, quien luego declaró: "Este permiso no está. Tienen varias actas de intimación, clausura. Ellos saben lo que está ocurriendo, lo que está mal, saben que es ilegal".

Días atrás, Vázquez había denunciado ante los medios: "Viene ensañado con nosotros, desde hace unos cuantos días que lo único que hacen es tratar de clausurarnos. Hace cuatro años que abrimos Oye Chico, los dos primeros años teníamos otra sociedad, hicimos la habilitación y pedimos todo. Yo tengo números de los expedientes que tramitamos, un total de 23 que están en la Municipalidad, y siempre tenemos problemas con la música, pese a que hemos pedido un permiso y pagamos el canon correspondiente". "Lo que más me molestó de todo esto, es que si uno ve una faja de clausura en un restaurante, la gente puede pensar que hay ratas, ratones o droga, cualquier cosa. No sé si es algo personal, pero se hace daño"; completó el empresario.