La noticia recorrió los medios digitales e impresos de toda la provincia presentando la medida como un gran gesto de la clase política uruguayense. Lo que se esconde detrás del primer recorte de gastos de representación.
Lo que no se señalaba con claridad es que la medida se dispuso sólo sobre un total de 8 días de junio, desde que se promulgó la ordenanza el 22 del mes pasado. De este modo, la reducción ronda unos $85,00 (ochenta y cinco pesos) para aquellos funcionarios cuya remuneración ronda los $7.000 mensuales. Además, sólo afecta poco menos de 1/3 del salario, ya que el cálculo se efectúa sobre el sueldo básico que apenas representa unos $2.500 para un sueldo de no es alcanzado por el descuento.
La medida entrará en plena vigencia cuando se abone el sueldo de julio, con recortes que rondarán los $225 mensuales para aquellos funcionarios que perciben contratos políticos o remuneraciones cercanas a los $7.500 mensuales. Schepens tiene la oportunidad de llevar el descuento al doble; es decir al 10% del sueldo básico, pero hasta el momento no hubo anuncios en ese sentido para los pagos de julio.
La disposición es transitoria, tiene carácter extraordinario y regirá sólo hasta fin de año. Por ahora, eso es todo lo que ha podido obtener el Intendente Schepens que debió soportar la resistencia de una parte importante del funcionariado municipal que no estaba dispuesto a colaborar con el ajuste en el gasto público.
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