La noticia del encuentro tiene unos días. El lugar, una oficina del Concejo Deliberante de Morón. La hora establecida, las 16. El invitado llegó puntual, vestido para la ocasión. La anfitriona fue la actual concejal radical Silvina Samparisi, quién mañana asume la presidencia del radicalismo en ese distrito. El invitado fue el empresario Ariel Diwan (referenciado con el senador nacional Martín Lousteau) quién hace dos meses intenta construir un armado territorial en la tierra en la que vive.

El objetivo de Diwan es ser candidato a concejal en las próximas elecciones como paso previo a postularse en el futuro como intendente de Morón. Su lanzamiento a la arena política tuvo una fuerte repercusión mediática y generó la preocupación en algunos sectores del macrismo moronense. A tal punto que apenas comenzó la campaña de instalación, el ex intendente Tagliaferro llamó a los popes de Juntos por el Cambio en la provincia de Buenos Aires para emitir un comunicado despegándose de la figura de Diwan y desmintiendo que el empresario pertenezca a ese espacio político.

El propio Diwan fue el encargado de difundir el encuentro con Samparisi. Ocurre que la flamante presidenta de la UCR local hoy ocupa una banca que en la jerga política se denomina como “prestada” en el Concejo Deliberante. Es decir, asumió por la licencia que presentó Natalín Faravelli, otrora mano derecha de Tagliaferro. Y la respuesta por parte del batallón twitero del macrismo en Moròn no tardó en salir a destrozar a Samparisi por la foto, que evidentemente enardeció los ánimos.

Desde concejales y compañeros de bloque de la propia Samparisi hasta militantes del tagliaferrismo salieron con los tapones de punta, enfurecidos con quien acaban de calificar como “traidora”. “La foto con Diwan es una provocación, no sea cosa que Ramiro le pida a Natalín (Faravelli), que vuelva a su banca y Samparisi se tenga que volver a la casa”, advierten desde el tagliaferrismo, visiblemente molestos con el movimiento.

Según pudo saber Primer Plano Online, el encuentro fue a pedido del diputado provincial y presidente electo del radicalismo bonaerense, Maxi Abad. Desde ya, la foto y la difusión no fueron casuales. La ira de los fieles laderos del exintendente Tagliaferro manifestada en 140 caracteres tampoco.

El radicalismo es el principal socio político del Pro en el espacio macrista y quiere sentarse en la mesa de negociación del cierre de listas, dentro de algunas semanas. Quiere decidir y ser parte de la lista de candidatos a concejales, si el escenario de unidad prevalece en Morón. En cambio, si hay competencia en primarias, el radicalismo institucional jugará con el sector que lo considere un actor protagónico y no de reparto.

Para esta elección intermedia, Ramiro Tagliaferro buscará encabezar la lista de senadores provinciales por la primera sección electoral. Según un dirigente muy cercano a el ex intendente, “nunca tuvo como posibilidad ser candidato a concejal” en esta elección. “Ramiro es el que ordena en Morón, y todos lo saben”, completó el vocero consultado.