En enero generó un cimbronazo dentro de Cambiemos cuando salió a oponerse a la exploración offshore en las costas de su ciudad, una iniciativa que había impulsado el gobierno de Mauricio Macri. No lo dice, pero sabe que esa postura en defensa de Mar del Plata disparó su imagen positiva.

Desde allí se posiciona ahora para rechazar incluso el planteo de intendentes de su partido, como el pedido para que sean los alcaldes quienes distribuyan los planes sociales. “La única forma de terminar con el desempleo es generando empleo, no administrando planes”, dice.

Montenegro sostiene además que “existe un pensamiento de no escuchar al interior” y apunta a los subsidios del transporte. “El boleto te sale 20 pesos en el Conurbano y 60 pesos en Mar del Plata, Rosario, Mendoza, Córdoba. Hay una visión sesgada de cómo distribuir los recursos”, dice.

Le tocó gobernar una ciudad que venía de cuatros de una gestión muy compleja y apenas comenzó su mandato llegó la pandemia. ¿Cómo fue ese proceso? ¿Qué cosas que estaban planificadas fueron postergadas?

–Mirá al principio todo. Sobre todo por el desconocimiento que teníamos sobre el tema. Yo asumo un 10 de diciembre y a los cuatro días tuve el incendio más grande de Mar del Plata. Unos días después arrancaba una temporada turística que no habíamos podido planificar. Con lo cual, uno dice: “bueno, arranco en marzo a empezar a generar todo lo que habíamos pensado”. Una de las prioridades era el tema del empleo. Mar del Plata es una de las ciudades históricamente más castigadas por la desocupación.

Pero el inicio de la pandemia te cambia las prioridades. Automáticamente tuvimos que empezar a trabajar muy fuerte en lo que tenía que ver con prevención, con salud. Y al poco tiempo también entender una necesidad que tenía que ver, no solamente con lo económico, sino con lo emocional. Esto era Salud, más Trabajo, más Cabeza, y con esto último me refiero a lo anímico.

A los dos meses empiezo a tener un enfrentamiento bastante notorio con el gobierno provincial, pero para mí no era un enfrentamiento político, sino que yo era y soy el intendente de esta ciudad.

¿Y a qué se debía ese enfrentamiento?

-Yo entendía que había algunas actividades económicas que tenían que habilitarse por la situación particular de Mar del Plata, pero además porque se tomaban decisiones pensadas desde el AMBA, como la gran mayoría de las decisiones que se toman.

¿Por ejemplo?

–La construcción estaba prohibida, pero el obrero de la construcción de Mar del Plata no se traslada en transporte público. Lo hace en bicicleta o en moto y la obra de construcción es al aire libre. Entonces, se tomaban medidas sin conocer la realidad de cada uno de los lugares. Eso hacía que yo me pusiera en una posición de defensa del trabajo, cuidando la salud y habilitando con protocolos.

Además, todo lo que tiene que ver con hotelería fue una actividad absolutamente prohibida. La gastronomía solo podía funcionar con take away. Esto nos obligó a tener un posicionamiento muy firme en defensa del trabajo y eso llevó a que las autoridades sanitarias afirmaran que yo no estaba cuidando la vida de los marplatenses.

¿Y eso cambió ahora?

–Mira yo en esto soy muy claro. Las decisiones que ayuden a mi ciudad yo las voy a acompañar y las decisiones que entienda que complican a los marplatenses no las voy a acompañar. No me importa el partido político o el espacio político del que vengan. Esto lo tengo clarísimo: yo fui elegido para gobernar esta ciudad y la gobierno para los que me eligieron y los que no me eligieron. Y a partir de ahí, si hay decisiones que afectan a los marplatenses nos van a encontrar en contra y yo lo hago saber.

¿Pero en esos temas aparecen instancias de diálogo?

-Obviamente que trato de dialogar. En el gobierno nacional y en la provincia a veces pude encontrar instancias de diálogo. Pero en lo local no. Ahí no hay ninguna posibilidad de diálogo. Antes pensaba que querían poner palos en la rueda, pero ahora te diría que directamente quieren que no haya rueda.

Y en definitiva, lo hacen sin darse cuenta que lo que están complicando no es mi gestión como intendente. Yo soy circunstancial. Están complicando la vida de los vecinos de la ciudad. Me parece que ahí hay una falta de responsabilidad de la política local de no pensar en los vecinos de la ciudad.

¿Cuáles son los hechos que le hacen decir que no hay instancia de diálogo con el kirchnerismo en Mar del Plata?

–Cuando vos encontrás, por ejemplo, que durante los tres años nunca votaron el presupuesto municipal. Cuando ves que este año no quisieron votar siquiera al presidente del Concejo Deliberante. Cuando empezás a hablar de temas complejos como la Zona Roja y se oponen. Cuando planteás otra cosa y te dicen que no.

Es decir, acá no hay una oposición que quiera generar diálogo para mejorar las condiciones de los marplatenses. Acá existe una decisión de obstruir el gobierno entendiendo que es la mejor forma de construir su lugar cuando, en definitiva, lo que están haciendo es destruir la ciudad.

Fernanda Raverta dijo que Usted se involucró en la interna local del PJ y luego en una carta dijo que esa intromisión significa que Usted la eligió como rival de cara a 2023. ¿Es así?

–No. Yo no elijo los rivales. Los rivales míos son la desocupación, la inseguridad, los problemas de los vecinos. Esos son mis problemas. No quién es el contrincante ocasional en una elección.

Mirá, yo laburo 14 horas por día como intendente pensando en todo lo que tengo que hacer. Pensando en cómo hacer cosas y cómo solucionarle la vida a la gente. No estoy pensando en una elección. Me parece una falta de respeto a la gente pensar que faltando más de un año y medio para la elección alguien que tiene la responsabilidad de gobernar esté pensando en una elección.

Pero imagínate además que yo no estoy pensando en mi elección. Mirá si voy a pensar en involucrarme en una elección interna de otro espacio. Además, pensar así es no conocerme.

Si entiendo que la oposición local, tomó una decisión muy clara, que es impedir lo que se hace acá. ¿Por qué? Porque creen que esa es la mejor manera de complicar una gestión, pero en definitiva lo que están complicando es la vida la gente.

¿Esa relación casi nula existió siempre o en algún momento hubo un diálogo?

-No. Yo apuesto al diálogo. Me parece que es muy importante y mantengo diálogo con sectores de la oposición tanto a nivel nacional como provincial, siempre pensando en los problemas que tienen los vecinos de mi ciudad. Pero no he logrado generar ningún tipo de diálogo en local.

¿Pero en lo provincial y nacional sí hay buenos canales de diálogo?

-Sí, claro. Pero además, lo tengo que tener porque soy el intendente de Mar del Plata. Ahora también te digo que hubo un montón de cosas que se tendrían que haber hecho mejor para mi ciudad, tanto en el gobierno nacional, como el provincial. Pero en lo local te tengo que decir que no puedo evaluar qué se podría haber hecho mejor, porque no se hizo nada pensando en los marplatenses.

Recién dijo que se tomaron decisiones pensadas desde el AMBA. ¿Existe una especie de marginación al interior?

–Existe un pensamiento de no escuchar al interior. Esto es así. Lo podés ver con los subsidios del transporte 85% en el AMBA y el 15% en el resto del país. El boleto te sale 20 pesos en el Conurbano y 60 pesos en Mar del Plata, Rosario, Mendoza, Córdoba. Hay una visión sesgada de cómo distribuir los recursos. No es porque lo diga Montenegro, es un dato objetivo de la realidad. ¿Si me siento discriminado? Si, totalmente. Si un obrero del Conurbano paga 20 pesos el boleto y acá lo paga 60, tenemos un problema.

El radicalismo dice que va a tener candidatos radicales en los 135 distritos. Incluso en donde gobiernan intendentes del PRO. ¿Usted aceptaría una interna?

–Bueno, yo soy producto de una PASO. ¿Pero tenemos que pensar en eso ahora? Tampoco me genera un problema porque no me cambia mi forma de seguir trabajando todos los días. Yo trabajo todos los días en tener un objetivo muy claro y entiendo que otros estén pensando en una PASO, en candidaturas. Pero yo no soy eso.

Pero la continuidad de su proyecto de ciudad depende en definitiva de la elección de año que viene. Y no digo la continuidad de Guillermo Montenegro, digo de su proyecto.

–Pero hoy mi problema tiene que ver con los problemas que tiene mi ciudad. No quiero correr el eje. Vos podes pensar que te estoy eludiendo la pregunta.

Sí.

–Pero no es así. No soy eso. Por ahí no me conoces, pero yo soy esto. Yo pienso de esta manera y la verdad es que no le dedico un minuto a lo que puede pasar el año que viene. No puedo estar pensando en si nos van a hacer una PASO. No, ni un minuto. Me parece poco serio y así lo planteo en todos lugares.

Desde hace semanas la coalición de gobierno atraviesa una fuerte crisis interna. ¿Qué lectura hace de eso y cómo impacta en su rol de intendente?

–Yo creo que es malo para la gente. Es como que te distrae de los problemas reales. Creo que lo más importante es que se solucione rápidamente y pensemos la gestión, no importa de qué espacio político seas. Me parece que lo más importante es que se resuelva rápido.

¿Le preocupa?

–Me preocupa como argentino. Obvio. Creo que estamos todos preocupados y por eso trabajamos mucho. Pero la verdad quiero que se solucione rápido y que empecemos a empujar para resolver los problemas.

Yo no creo que se resuelvan los problemas si no es empujando. Y desde el lugar que te toque y no importa el espacio político que vos trabajes. Empujá.

Yo creo que el kirchnerismo hizo muchas cosas mal en estos dos años y medio de gestión. Hubo cosas mal. Cosas que afectaron a Mar del Plata. Pero en definitiva, eso será una cuestión que se discutirá el año que viene. Yo quiero que discutan sus problemas y lo resuelven rápido para que no afecte a la Argentina.

¿Qué cosas se hicieron mal?

–Por ejemplo todo lo que tiene que ver con la inflación. Eso nos pone como país en un lugar difícil en el sentido de cómo nos ven desde afuera. Es una situación compleja para poder generar empleo e inversión. Es decir, el empleo tiene que salir desde lo público para dar oportunidades al sector privado, a través de la inversión, que es el que finalmente genera empleo. Estado no genera empleo, genera servicios, salud, educación, seguridad. El Estado tiene que generar las condiciones para que los privados inviertan y generen empleo.

Varios intendentes del PRO plantearon que deberían ser ellos quienes se encarguen de administrar los planes sociales. Que los jefes territoriales son quienes mejor pueden encarar esa tarea. ¿Está de acuerdo con eso?

–Es que no podemos pensar en eso. Tenemos que pensar en la generación de empleo. No es una posición política partidaria. Mi posición es que yo, desde el Estado local, tengo que generar el vínculo con el Estado provincial y nacional, no importa quién sea el gobierno, para generar inversiones en una ciudad con las características de Mar de Plata.

Vos me preguntas si estoy a favor o en contra. Sucede que el plan en sí mismo es un medio para contener una determinada situación, no puede ser un fin. No está bien, naturalmente no está bien. Y no importa quién lo administre. Yo creo que lo importante es generar las condiciones para que haya laburo.

¿Cree que Cambiemos debe incorporar a sectores del peronismo de cara a la elección del año que viene? ¿Hay que ampliar la alianza opositora?

–Mira, yo creo que nosotros tuvimos un desafío que nadie pensó que podía existir y que fue mantener unido a Cambiemos tras la elección de 2019. Eso se logró y creo que está claro y lo importante ahora no es solamente mantener la alianza, sino agrandar el espacio porque la discusión no es entre nosotros. Se trata de dos modelos de país: en uno, los que pensamos de esta manera y el otro es el kirchnerismo.

Entonces está claro de que hay que ampliar, con la gente que tenga un pensamiento vinculado a los valores, a la austeridad, a la honestidad. Sobre esto no hay ninguna duda y nadie puede decir lo contrario.

Me llama la atención que cuando menciona al gobierno hace referencia al kirchnerismo y no al peronismo.

–No, de hecho yo tengo peronistas en el gobierno. Tengo peronistas, tengo gente de la Coalición Cívica, tengo del socialismo, tengo radicales. No, yo creo que el peronismo y el kirchnerismo son dos cosas distintas.

Usted tuvo un planteo crítico a la exploración offshore en las costas de Mar del Plata y eso generó posicionamientos encontrados en Cambiemos. ¿Esto es una virtud en la coalición o es una debilidad? ¿Existe margen en la Argentina que atravesamos para que existan diferentes posicionamientos en un mismo espacio?

–Mirá, está claro cuál es mi función. Yo defiendo los intereses de los marplatenses. Y en esto yo fui muy claro: si no tengo la información de lo que implica una exploración de petróleo cerca de las costas Mar del Plata y entiendo que puede llegar a generar un problema yo no puedo avalarlo.

Además, publican en el Boletín Oficial un 30 de diciembre a cinco de la tarde una decisión de estas características sin que haya una explicación previa llama la atención y no me puede encontrar de otro lugar que no sea en la defensa de los intereses de los vecinos de mi ciudad.

¿No hubo un cuestionamiento dentro del Cambiemos hacia Usted por oponerse a un proyecto que su propio gobierno había impulsado en su momento?

–Bueno, yo tuve una controversia pública con Javier Iguacel en una charla que se hizo acá en Mar del Plata. El tiene una posición y yo tengo otra. Yo gobierno una ciudad que entiende que este es un tema que nos puede llegar a afectar si no tenemos la información acabada de cómo son las cosas. Punto. Teniendo la información veremos si es mejor o peor. Pero necesitamos tener este tipo de información para poder saber qué es lo que está ocurriendo. A partir de ahí, si esto se entiende como una controversia yo no tengo ningún problema en pelearme con los propios y los extraños porque mi función es defender los intereses de mis vecinos.

¿Con Iguacel pudo conversar después de esa controversia?

–Si, por supuesto. Y sigo hablando. Él tiene una posición y yo tengo otra.

El PRO tiene varios candidatos a presidente y varios candidatos a gobernador. Muchos con perfiles muy distintos. ¿Con qué sector dentro del PRO se siente más representado?

–Yo creo que lo importante de cara al año que viene tener una opción clara para enfrentar al kirchnerismo. Pero no para que crezca nuestro espacio, sino porque creo que es bueno para la Argentina. Yo creo que esto que nos pasó fue malo para la Argentina.

¿Qué es lo que fue malo?

-Ésto. Cómo se está gobernando. Entonces, la decisión es que trabajemos todos pensando en una elección que es muy importante para Argentina.

¿Cómo se lleva con el gobierno de Kicillof? En algún momento hubo algunas diferencias, entiendo por la distribución de recursos a su municipio.

–Sí, también hubo algunas diferencias en la pandemia. El problema de la distribución de recursos es histórico en Mar del Plata. No tiene que ver sólo con este Gobernador sino con el mecanismo con que se distribuyen los recursos.

Tengo excelente relación con Sergio Berni. Lo conozco desde la época en que yo era ministro de Seguridad y él secretario de Seguridad de la Nación. Trabajado en conjunto el tema de seguridad en Mar del Plata. Incluso en todo lo que tiene que ver con el Operativo Sol del verano.

¿Pero se siente escuchado al momento de reclamar por recursos que necesita para la ciudad?

-(Se ríe) Es que el problema no es escuchar a Montenegro. El problema no es Montenegro. El problema es que escuchen a los marplatenses.

Yo creo que hay muchas cosas que se podrían haber trabajado mejor para la ciudad. Si vos me preguntás si reclamo más obras. La respuesta es sí. Quiero más obras para esta ciudad. ¿Hubo muchas? No. ¿Hubo en otros lugares de la provincia? Puede ser que sí. Pero acá no.

¿Qué es lo más urgente para esta ciudad en términos de programas de gestión?

-Mira yo tengo una perspectiva muy clara que tiene que ver con el empleo. Busco que las decisiones que tome este gobierno sean transversales con la generación de empleo. Es decir, todos los temas de gestión tenemos que verlos desde la perspectiva de la generación de empleo. Esto en todo lo que tiene que ver con obras de infraestructura, con el cordón frutihortícola, con el Parque Industrial, con el Puerto, con el Polo Tecnológico. Todo verlo desde una perspectiva de cómo bajar el índice de desempleo.

¿Y el problema del desempleo a qué se debe? Entiendo que según los últimos números, Mar del Plata de ubicó en segundo lugar con más desempleo detrás del Gran Córdoba.

–Primero hay que decir que nunca un intendente tomó posición sobre esto. Siempre se dijo que tiene que ver con la macroeconomía, con las decisiones del gobierno nacional, del gobierno provincial.

Nosotros estamos haciéndonos cargo de este tema y buscamos cómo podemos ayudar en lo que tiene que ver con las habilitaciones, en lo que tiene que ver con la inversión privada. Ayudando al privado a que invierta y que eso genere empleo.

Pero el problema es que existe un trabajo estacional que tiene que ver con una época del año que genera que haya gente que viene a la ciudad durante la temporada y que después se queda trabajando en forma permanente.

Cuando ves los números de desempleo cambian mucho según el trimestre que se hace la medición. Y creo además que existe una realidad y es que Mar del Plata es una de las ciudades más lindas del mundo. Mucha gente quiere vivir acá. Tiene sierras, lagunas, el mar. Vivir acá es vivir en un lugar maravilloso. Entonces es lógico que mucha gente quiera vivir en mar del Plata.

¿Cuántos marplatenses nativos hay acá? No hay muchos. De hecho, mi viejo vino a vivir acá en el 56 porque era submarinista y la base de submarinos estaba acá. Y yo nací acá.

¿Y entonces cómo se enfrenta ese desempleo?

-Nosotros tenemos que pensar cuáles son las industrias que hay para potenciar. Cuáles son las nuevas industrias que podemos ayudar para que se instalen: lo que tiene que ver con la tecnología, con el cordón frutihortícola que es uno de los más importantes de Argentina.

Quienes no somos de Mar del Plata quizás solo vemos una pequeña parte de esta ciudad vinculada al turismo. ¿Qué otras cosas tiene la ciudad si uno se aleja de las playas?

–Mar del Plata tiene todo. Tenés una gastronomía de primer nivel porque tenés productos, tanto en lo frutihortícola como en lo que tiene que ver con carne o pescado, de primer nivel. Entonces comés todo fresco. Es absolutamente distinto a cualquier otro lugar. Tenés un parque industrial que es el cuarto o el quinto de Argentina y que tiene más de 4.000 trabajadores que se desempeñan adentro del parque.

Nosotros impulsamos esto que por estos días la provincia acompañó y que tiene que ver con adherir a la ley de Economía del Conocimiento. Es algo que veníamos planteando desde hace rato. Esto es muy bueno para una ciudad como Mar del Plata que tiene una base tecnológica importante.

Muchos de los que se dedican a la tecnología con empresas como Accenture o Globant ya están instaladas. Ese es un empleo de calidad, un empleo que buscamos potenciar porque tiene que ver con los jóvenes que no queremos que se vayan de mar del Plata.