Lo primero que aclaró el concejal en FM DE LA COSTA es que no se pasa al ‘massismo’ porque su identificación es con el proyecto nacional “y estoy más que convencido que seguirá siendo de esa manera”.

Con respecto de la Corriente de Opinión Política, sostuvo que Guillermo Skrt lo invitó a participar del lanzamiento y “me parece que es de buena persona acompañar algo que creo es correcto y necesario para el Justicialismo de Patagones. Tiene que ver con la apertura de nuevos espacios que nos lleven a poder reflexionar, a llevar modelos diferentes, alternativos al oficialismo”.

“Me parece muy bien que los peronistas podamos juntarnos y debatir, discutir y plantearnos distintos proyectos, los que nos sentimos justicialistas auténticos de cara a lo que es Patagones como máximo interés”, recalcó.

Más adelante Bari admitió que hace dos o tres años que comenzó a tener diferencias importantes con la actual gestión, lo que hoy se traduce en la decisión de firmal un bloque unipersonal: “Lo he hecho a partir de un perfil de respeto, entendiendo cierta disciplina partidaria en el bloque, pero obviamente mi situación de incomodidad se ha ido profundizando, no con el bloque -porque con mis compañeros de bancada me siento conforme- pero esta distancia de pensamientos nos incomoda a todos y yo no me pienso callar, porque tengo que por sobre todo hacer valer mis principios, mis ideales”.

“Cuando hay acciones del gobierno que van en contra de mis principios, de mi ideología o de lo que yo creo que tienen que ver con medidas que defienden el bien común, las voy a plantear y en ese sentido puede generar incomodidad para todas las partes. Por lo tanto hoy le comunique al presidente del bloque (Edgardo Garat) que a partir de la próxima sesión formaré un bloque unipersonal, para permitirles a ellos llevar las acciones que crean necesarias como oficialismo. Se acercan tiempos políticos y me parece necesario que estas cuestiones se puedan sincerar”, indicó.

Las diferencias con Curetti

“Mi distancia con el oficialismo comienza luego de ganar las últimas elecciones (en el 2011). A los pocos días empecé a entender que en el fondo había habido toda una estrategia para que el intendente se fuera del gobierno. Ahí me sentí muy mal porque creo que de alguna manera le habíamos fallado a la gente”, manifestó Bari.

Agregó que “se trató de una situación que hasta ese momento desconocía y que tuvo que ver con un uso del poder, con el que no estaba de acuerdo que se hiciera de esa manera. Eso particularmente empezó como a marcar una diferencia, una grieta, donde me empecé a sentir afuera de algunas cuestiones y comencé a notar que el proyecto se tornaba demasiado personalista. Creo que con el paso del tiempo se ha ido profundizando”.

“Mi enojo no pasó porque quería ser candidato a intendente, sino por la estrategia que se venia armando. La idea era la de una renovación, aunque después empecé a entender que no era así  porque había gente de la misma edad que Garcés, gente con otra identidad en el proyecto. Lo que me molestó es que no se respetara la trayectoria, la experiencia, y no justamente la mía”, subrayó.

“No sé porqué razón (Curetti) no puso en ese lugar a muchas de las personas de aquel grupo que era extraordinario de gente joven, con una preparación y capacidad excelente para administrar el municipio. Hoy si te puedo decir que no queda casi ninguno de aquel grupo. Cuando empezás a entender que se busca a una persona sin experiencia en el proyecto, sin identidad -por lo menos en la historia de este proyecto- , sin experiencia, te das cuenta que había una cosa extraña”, reveló el concejal.

En ese rumbo admitió que “al poco tiempo comenzaron a aparecer actitudes de limitaciones o condicionamientos fuertes al accionar de Garces, y se empieza a generar el operativo retorno. Me pareció un proceso decadente de cara a lo que la gente quiere y eso no hace con el poder”.

Más adelante Bari opinó que “la continuidad durante tanto tiempo ha ido provocando algunos vicios, el proyecto se ha tornado demasiado personalista, hay algunos funcionarios que entienden esto como un empleo, se ha ido perdiendo audacia con el paso del tiempo, se han ido premiando actitudes que tienen que ver con la soberbia, con el egoísmo, a veces con sentirse dueños de la verdad. Hay una negación con todo lo que se opina diferente, falta mayor política de consenso. Se maneja, como se dice vulgarmente, como un patrón de estancia en la época de la oligarquía”.

Bari mencionó que llegó el momento de generar un recambio: “el intendente hace algunos años decía que era la última vez, y ahora ha dicho que no vislumbra ningún candidato, está poniendo énfasis de que él será nuevamente el postulante. Todas estas situaciones han marcado mi alejamiento de un proyecto del cual fui por mucho tiempo un defensor”.

Consideró que “nadie debe sentirse imprescindible. Las cosas no se tienen que hacer a dedo como ahora, no lo considero sano, porque después eso se traduce en la pérdida de humildad, falta de audacia y eso no es bueno para nadie. El intendente tiene todo el derecho del mundo a crecer a nivel provincial, pero debería haber dejado a los peronistas decidir un nuevo liderazgo”.

“Yo entiendo un liderazgo con mucha más apertura, con mucho más respeto del disenso y del consenso, con la posibilidad de que los funcionarios crezcan y trabajen, no que todo tenga que pasar por una sola persona. Cuando crece alguien alrededor del líder, se vuelve preocupante para él y para su poder”, acusó.

“Tengo claro mi alineamiento con el gobierno nacional, pero es cierto que si en el plano local en patagones se puede generar algo y me invitan a participar y surge un proyecto tentador para poder plantear una alternativa seria de gobernabilidad es probable que pueda estar. Lo que sí, no me desvela ser candidato, para nada”, concluyó.