El radicalismo ya entró en fase de sinceramiento frente a la crisis que le plantea el tener dos precandidatos presidenciales lanzados dentro de su alianza en UNEN y al mismo tiempo dirigentes en provincias que se acercan a Mauricio Macrio Sergio Massa como refuerzo para la perfomance electoral de 2015.
Hasta ahora el Comité Nacional no solo toleró esas fotos sino que hasta las justificó. Ernesto Sanz no podía hacer otra cosa cuando uno de los integrantes de esa mesa, el jujeño Gerardo Morales, fue el primero en sacarse la foto conMassa en su provincia, en un intento por mostrar algo de peronismo en una provincia donde el radicalismo tiene buenas chances en esta ocasión, pero que debe pelearlas contra Eduardo Fellner y todo el aparato de Milagro Sala.
Mientras decanta la situación de los candidatos en FAUnen y los radicales deciden si pueden llegar a agosto del año próximo con dos candidatos presidenciales, otra realidad ya está instalada en las provincias para poder continuar con la política de alianza con esos extrapartidarios y al mismo tiempo no romper formalmente con la UCR.
El partido ya comenzó a habilitar en algunas provincias, a través de pronunciamientos de la Convención partidaria local, la posibilidad de la doble boleta presidencial para los candidatos locales.
Esto significa que los radicales candidatos en las provincias podrán llevar pegada la presidencial del postulante partidario que gane la PASO, si es que llega a esa instancia, y por otro lado la que lleve a la presidencia a Macri, Massao el que sea.
La cuestión no es nueva y hay antecedentes de sobra. De hecho el modelo hasta tiene copyright en Mendoza. En 1995Víctor Fayad fue como candidato a gobernador mendocino en un acuerdo doble. En ese momento Juan Octavio Bordón le disputó la presidencial a Carlos Menem, que llegaba a la reelección con el Pacto de Olivos bajo el brazo, en una fórmula con Carlos "Chacho" Álvarez. Unieron allí el Frente Grande con PAIS.
Fayad, respaldado por los acercamientos del Grupo El Molino, donde además de "Chacho" Álvarez, caminó Federico Storani, ató su boleta para gobernador a esa fórmula de Bordón y al mismo tiempo llevó otra boleta con el candidato radical Horacio Massaccesi, que llevaba de vice al cordobés Antonio María "la Tuta" Hernández. Para el radicalismo la experiencia no fue excepcional: Bordón-Alvarez desplazó a la fórmula radical al tercer puesto.
La Convención Nacional del radicalismo aún no autoriza a nivel nacional acuerdos de ese tipo, pero aunque Lilia Puig de Stubrin lo resista, las presiones de las provincias serán cada día mas fuertes.
La ola ya comenzó y de hecho la convención de la UCR mendocina autorizó a llevar otros candidatos a presidente atados a la boleta de gobernador, aunque a Julio Cobos no le simpatice la idea.
En Mendoza la ola radical va hacia Macri, pero el "modelo" a aplicar será el mismo en otras provincias como Jujuy, Tucumán, Formosa, con Morales, José Cano o Luis Naidenoff. En esos casos el destino fue Massa, pero en realidad la próxima novedad vendrá de La Rioja, donde el radical Julio Martínez ya tiene cerrado un acuerdo con Macri. En ese caso hubo resistencia a la foto massista, pero habrá también "modelo" de doble boleta presidencial.
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