El hombre no se calla nada. Se dice vecinalista-ultrakirchnerista, pero critica lo que no le parece correcto. A poco más de cuatro meses de asumir como diputado provincial, el ex intendente de Coronel Suárez Ricardo Móccero no se muestra conforme con el funcionamiento de la cámara y reclama “un poco más de celeridad”. Por otra parte asegura, sin vueltas, que tanto Massa como los que se pasaron al Frente Renovador “son traidores”. Recuerda también que durante la Presidencia de Kirchner el contacto de los intendentes con Nación era mucho más fluido, aunque resalta que la gestión de Cristina Fernández es “tan popular como

la de Néstor”. Estos temas y varios otros, mano a mano con La Tecla.

-Muchos señalan que si el massismo y el kirchnerismo no logran la unidad, la Presidencia quedará en mano de UNEN.

-Son expresiones de deseo, tanto de Massa como de UNEN. Massa dejó de ser creíble. Los votos que se llevó en la última elección se debieron al enojo de la gente con el Gobierno. Y el Gobierno tomó nota y cambió muchas cosas, como la suba del piso del impuesto a las Ganancias. Por otro lado, Massa propone más de la vieja política, más de la política de Duhalde y Barrionuevo. Nosotros estamos convencidos de que el liderazgo de la Presidenta y las políticas llevadas a cabo tienen que continuar más allá de 2015, sea quien sea el candidato del FpV, Randazzo, Scioli o cualquiera de los que están en danza. Lo de UNEN es un rejuntado de dirigentes que han estado en diferentes partidos. Lo único que pretenden es que no siga el kirchnerismo. Los proyectos económicos, por ejemplo, no existen.

-¿Las puertas del FpV están cerradas para Massa?

-Si me preguntás a mí, te digo que a Massa no lo quiero ver ni en fotos, que vaya con Macri o que en el UNEN. Es un traidor que, evidentemente, estaba en el FpV por conveniencia. El ex intendente Ubieto le dejó un distrito impecable. Lo único que hizo él fue beneficiar a los countries, a la gente de mayor poder adquisitivo. Pero hay un Tigre que no se conoce, el de la gente pobre, discriminada. El hombre está protegido. Tenemos que luchar por la continuidad de este Gobierno, el que lucha por los pobres.

-¿Los que se fueron con Massa también son traidores?

-También. Si se decían peronistas, porque supuestamente todos los peronistas eran kirchneristas, y aplaudieron y usaron para beneficio propio y de sus distritos durante diez años las políticas de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, ¿cuál es el motivo para de golpe decir “no estoy más convencido”?. Nadie se convence de golpe. Piensan que se va a perder y salen corriendo como ratas. Después se van a arrepentir, porque el FpV va a volver a ganar, y todos esos traidores van a quedar en la vereda de enfrente. Y te lo dice alguien que es kirchnerista y no peronista.

-¿Se puede ser K y no peronista?

-Yo no soy peronista. Vengo del Partido Intransigente, de Oscar Alende, como mi padre. Cuando conocí a Kirchner, en 2003,

le di mi apoyo total y absoluto; me hice leal a él y, entre otras cosas, me banqué la crisis del campo, en 2008. Para que te des una idea, Hugo Bilbao, hoy titular del OPDS, era por entonces presidente del PJ local y se paraba atrás de una camioneta arengando a los del campo; en cambio yo estaba en mi casa defendiendo las políticas de Nación y soportando los escraches de los productores agropecuarios. A veces, con el fin de pegarme, me tildan de ultrakirchnerista, y la verdad que lo único que consiguen es ponerme contento; a Néstor Kirchner lo llevo en el corazón.

-¿Por qué dejó de ser vecinalista?

-En realidad, nunca se deja de ser vecinalista. El vecinalismo trabaja a nivel local, con políticas locales ,y nada más. Si vos coincidís y estás convencido de que el Gobierno nacional es popular y va por el mismo camino que va uno, hay que apoyarlo. Desde 2003 nosotros siempre adherimos al FpV. A nivel local vamos con nuestra boleta, la 318. No dejé de ser vecinalista, soy vecinalista-kirchnerista. El vecinalismo está dividido en dos. Por un lado, los que coinciden con el Gobierno nacional y bajan de todos los ministerios a sus municipios las políticas nacionales. El otro vecinalismo es el que lleva adelante Carlos Sánchez, y antes Carlos Aprile (Tres Arroyos). Ellos siempre apoyaron las políticas del Gobierno nacional, pero van a la elección con la boleta corta.

-En estos tiempos en que tanto se duda de legisladores e intendentes, ¿se puede asegurar que Móccero no se va a pasar al massismo…?

-¡Noooo! Con Massa, nunca; antes, muerto.

-¿Los intendentes tienen la misma llegada a Nación que tenían durante la Presidencia de Kirchner?

-No, no es lo mismo. Nos faltó esa figura que decidía, que hacía. Por ejemplo: nos juntábamos en la Sexta con los intendentes del FpV y llamábamos por teléfono al secretario de Kirchner, le preguntábamos cuándo Néstor nos podía recibir; a los cinco minutos nos respondía que fuéramos al otro día. Hoy no es así. Cristina tiene otro modo de gobernar, que sigue siendo popular. De todos modos, es cierto, nos cuesta más. Yo tengo llegada con Julio de Vido, con Alicia Kirchner, con Alberto Sileoni y otros tantos ministros, pero no es lo mismo que cuando hablaba en forma directa cada quince días con Néstor Kirchner.

-Igualmente, según muchos jefes comunales, es más fácil llegar a Nación que a Provincia.

-Sí. Antes funcionaba distinto. Los ministros recibían absolutamente a todos los intendentes, sin muchas vueltas. Y lo mejor era que las cosas se solucionaban. Hoy está todo muy quieto. Los que resuelven son muy pocos. Ellos son el ministro de Salud, Alejandro Collia; el ministro de Seguridad, Alejandro Granados; el ministro de Trabajo, Oscar Cuartango; y la ministra de Gobierno, Cristina Alvarez Rodríguez. Todo esto se lo dije al Gobernador. Al parecer ahora hay una predisposición para que esto se corrija, vamos a ver.