Los cambios fueron dentro de la misma estructura e incluyeron a funcionarios de trayectoria. María Eugenia Bove fue oficializada como secretaria de Gobierno. No hubo incorporación de nuevos funcionarios.
Se viene un año de elecciones legislativas y el intendente de General Alvarado, Germán Di Cesare, decidió reordenar su gabinete con algunas modificaciones puntuales dentro de la misma estructura de gobierno aunque sin sumar, al menos por ahora, nombres nuevos a la gestión.
En ese contexto, quien fuera hasta la semana anterior, titular del área de Turismo, Cultura y Deportes, María Eugenia Bove, una de las funcionarias más ligadas al proyecto político del jefe comunal, pasó a ocupar la secretaría de Gobierno, algo que ya se venía proyectando hace algunos meses y finalmente se concretó.
Se trata de una de las funcionarias más “antiguas” que comenzó su carrera política en 2003, cuando asumió Tomás Hogan la intendencia del distrito. Su primera experiencia fue en el área de Protocolo y Ceremonial, para luego cumplir diversas funciones hasta llegar en 2009 a Turismo.
Ese sector, clave en un destino con las características de Miramar será ocupado por el ex Director de Promoción Turística, Carlos Pagliardini con amplia trayectoria municipal y también muy comprometido con el proyecto político del Frente Renovador.
La Secretaría de Planificación, Ambiente y Obras Públicas, quizá era la dependencia donde más se esperaba una modificación ya que se veía algo desgastada la gestión de Alfredo Aguilar. ¿Habrá sido este el detonante de los cambios? Sólo Di Cesare y su equipo lo saben.
Allí fue a parar, Martín Scarpignato, quien vale la pena volver a referenciar, junto con Bove son las personas más consultadas por el mandatario alvaradense. Este funcionario va por su tercera gestión al frente de un área importante ya que viene de Gobierno y anteriormente desde Economía.
Según comentó una fuente a LA CAPITAL, “hay proyectos de obra pública muy importantes para este año en el distrito y el intendente dispuso poner un hombre de máxima confianza”.
Esa aseveración, tranquilamente podría ser correcta ya que durante este último tiempo, ya entrado el verano, se desarrollaron obras de asfalto por la deteriorada zona céntrica las cuales continúan y fueron le cambiaron la cara a la ciudad.
De todas maneras, los barrios periféricos necesitan de nuevos servicios como asfalto, cordón cuneta y ampliación de cloacas. Según reconoció el propio Di Cesare a principio de año ante este matutino, “hay proyectos interesantes ya aprobados y presupuestados en la órbita provincial y se espera comenzar a realizarlos este año”.
Aunque aún faltan varios meses, la llegada de las elecciones legislativas ya comienza a hacer ruido en todos los sectores políticos y lógicamente el oficialismo no es la excepción. Pese a que en votaciones claves dentro del Concejo Deliberante, logró el apoyo de bloques opositores minoritarios como en la rendición de cuentas y presupuesto 2017, seguir perdiendo representatividad en el espacio “massista”, sería algo muy riesgoso para el jefe comunal de cara a lo que resta de su mandato.
En definitiva, será clave el panorama de aquí a los próximos meses mediante la cristalización o no, de proyectos que le sigan brindando mayor calidad de vida a la comunidad.
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