El empresario Miguel Calamari confirmó su lanzamiento como candidato a gobernador, en nombre del Frente Renovador que a nivel nacional lidera Sergio Massa y con el respaldo en nuestra provincia de “Pueblo Nuevo”, el sector que lideran los diputados Darío Hernández y Daniel Robledo. En diálogo con El Diario, Calamari explicó lo que significa el desafío y aseguró que el objetivo es “ganar la elección” para hacer de nuestra provincia “una pequeña San Luis”.

En una oficina de su agencia de autos de la Avenida Luro, con la compañía de su perra Camila y poco antes de una recorrida por las localidades de la Ruta 5, Calamari recordó que el primer contacto surgió a partir de la idea de un asesor de Sergio Massa, que es pampeano. El empresario lo charló con sus allegados y tanto la familia como los amigos le dieron el visto bueno: “mis hijos me están apoyando mucho”, se contenta.

“No es un paso fácil para mí, porque tengo que cambiar de ámbito”, dice. Reconoce su desconocimiento de algunas cuestiones políticas, insiste en que su aporte lo puede hacer desde lo empresarial-comercial y ni se mete con los debates sobre la derecha, el centro o la izquierda. Se dice a sí mismo, simplemente, un “peronista disidente”.

Disidente ahora, porque según cuenta apoyó la gestión presidencial de Néstor Kirchner: “me gustaba. Después con Cristina creo que empezó a confrontar demasiado, y bueno... después apareció Massa y nos dimos vuelta, o sea, no nos dimos vuelta sino que empezamos a pensar un poco mejor la cosa”, explica en diálogo con El Diario.

“Escucho y rescato”

Del presidenciable tigrense señala que “me gusta cómo trabaja en el tema de seguridad, voy a seguir sus lineamientos”. Cree que lo que hace falta principalmente en la provincia es “crear empleo genuino, zona por zona. Hay que crear trabajo en los pueblos. Pero lo que vemos es que la provincia es una de las pocas que cada vez tiene menos habitantes, los chicos se van a estudiar y después no vuelven. O se es empleado estatal o nada... Nosotros queremos hacer un proyecto a 20 años, en el que haya fábricas y empresas”.

“Puedo aportar desde el sector empresarial, no desde el sector político. De lo privado tengo mucho para aportar y siempre escuchando los consejos de los que saben de política. Escucho a todo el mundo y rescato ideas”, apunta. De todos modos Calamari se reconoce más como “comerciante” que como empresario.

Tiene 55 años, nació en la santafesina Santa Teresa, tiene 5 hijos. Llegó a Santa Rosa en el año ‘93. “Me siento capaz de aportarle cosas a la provincia”, asegura.

Calamari admite que hasta ahora no hizo nada en política. En 2011 hizo un intento de instalar la candidatura presidencual de Mario Das Neves, junto al vernista Éxito Gianforte. Pero quedó en la nada. Gianforte dice que no participó en líneas internas, ni como dirigente ni como militante, más allá de su identidad peronista. “La política me gusta, leo, trato de estar informado. Lo que quiero es devolver lo que me ha dado esta provincia, pero no soy político”, insiste.

Así y todo, dice que aspira a ganar la elección, porque “hay mucha divisón en el peronismo, estamos en contacto con mucha gente que se quiere sumar”. Desde ya, el sector tendrá un candidato a intendente, que por ahora es un secreto.

“Yo lo que veo es una provincia demasiado chata; hay que crear empleo genuino para reactivarla. Ya tengo el compromiso de un par de empresas vinculadas al automovilismo que se instalarían si nos toca gobernar. Mi idea es hacer de La Pampa una pequeña San Luis”, reitera. Y describe su propia trayectoria: “a los 20 años tenía el sueño de una gestoría para hacer trámites y lo hice; a los 25, tenía el sueño de vender autos usados y lo cumplí; a los 30, quería vender autos 0 kilómetro y lo cumplí; ahora tengo el sueño de gobernar la provincia de La Pampa”.