El senador tucumano, ex ministro de Salud de la Provincia durante la pandemia de influenza entre 2009 y 2010, analizó la situación epidemiológica que atraviesa el país y la provincia con la influenza recortando terreno al COVID-19.
La Gripe A es uno de los temas del momento en Tucumán. Causa preocupación, aunque los especialistas llaman a mantener la calma. Y tienen sus razones. Con el tiempo, a más de una década de la pandemia de influenza que impactó a la provincia y al resto del país, las condiciones son distintas, más favorables gracias al conocimiento adquirido y su aplicación en la creación de vacunas para combatir la enfermedad. Luego de dos años de leer en informes epidemiológicos solo la palabra COVID-19, los virus H3N2 y H1N1 –en menor medida- se abren camino. Quien opina al respecto es el senador y médico Pablo Yedlin, quien se desempeñó como ministro de Salud tucumano entre 2007 y 2015.
“Lo importante es que la gripe es epidémica estacional, en general, todos los inviernos tenemos una epidemia gripal, es normal”, aclara el galeno a eltucumano.com, antes de indagar en las posibles razones del brote anticipado de influenza tipo A. “Los últimos dos años son atípicos, por el Covid y las medidas de cuidado hicieron que no hubiera circulación. Este año, evidentemente, eso se acabó y tenemos un brote que es atípico por lo temprano”, describe.
Para el profesional, son dos las posibles razones del aumento inusitado de casos detectados: por un lado, el avance de la vacunación contra el COVID-19, que inmuniza contra la enfermedad provoca una merma indefectible en su circulación; y, por otro lado, un relajamiento de los hábitos de cuidado adquiridos durante estos dos años de pandemia. “Hay una mezcla de las dos cosas, hay una baja en los cuidados, porque estamos todos vacunados, ha hecho que el virus pueda volver a circular”, explica.
Respecto a la potencia del virus de influenza que comenzó a circular, Yedlin establece una diferencia respecto de aquel agente viral que impactó con fuerza entre 2009 y 2010. “Cuando decimos Gripe A no nos referimos a la pandémica de 2009. La gente tiende a preocuparse mucho porque les recuerda esa pandemia; no es esa la situación, dejó de ser un virus de preocupación”, aclara el senador galeno.
Como indica el resto de los profesionales de salud, Yedlin incentiva a la población a vacunarse bien arranque la campaña de vacunación antigripal y antineumocócica. Además, llama a guardar especial cuidado con los grupos de riesgo escogidos por esta enfermedad: “Es una enfermedad que tiene gravedad en grupos como embarazadas, en mayores de 65, niños pequeños de entre seis meses y dos años y en personas inmunodeprimidas”, describe y adelanta que las vacunas llegarían entre fines de marzo y principios de abril. “La vacuna que vamos a entregar en la Argentina es la del virus que circuló en el hemisferio norte, lo cierto es que, por suerte, el virus es esperable y que la vacuna es efectiva”, concluye.
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