En el departamento de Metan, un niño de 7 años y otro de 13 estaban jugando en el fondo de la casa del más chico. La madre del pequeño al verlos atrás de un horno preguntó que estaba sucediendo al notar algo extraño en la actitud de los niños, a los que el mayorcito respondió que estaban jugando con un “palito”.

 Más tarde, la madre inquieta por sospechar que algo malo le había pasado a su hijo, mientras lo bañaba logró que su hijo confesara que le dolía sus partes íntimas por culpa del otro niño con el que supuestamente estaban jugando. Inmediatamente la madre decidió hacer la denuncia y posteriormente el pequeño fue revisado por un médico, quien constató lesiones en las partes íntimas del niño tratándose de de un abuso sexual.

Los padres del mayor de los niños ya fueron notificados, el caso está en la justicia y profesionales trabajan en la contención del niño y la familia.