Al cumplirse 6 meses de la inundación más trágica que vivió la capital bonaerense, las asambleas de diferentes barrios acompañados por organizaciones sociales y políticas volvieron a la calle. Una columna de cuatro cuadras de personas, llegaron desde Plaza Moreno hasta Plaza San Martín. Por la tarde hubo una serie de charlas organizada por la asamblea de inundados en la puerta de Casa de Gobierno. Críticas a Cristina, Scioli y Bruera.
Antes de la lectura, proyectaron dos vídeos, uno con una canción especialmente compuesta para los damnificados de la inundación y otro elaborado por las asambleas de inundados en el que relataban los hechos del 2 de abril y la posterior organización de los inundados. En ese vídeo se agradeció a las organizaciones políticas, sociales y religiosas que se pusieron a disposición de las víctimas. También a los medios que los acompañaron y lo siguen haciendo hasta la actualidad.
“Esta es la asamblea que abrió las puertas del municipio cuando Bruera nos cerró” empezó a rezar el documento final, en el que también se recordó que “6 meses después los funcionarios siguen mintiendo”.
“Seguimos reclamando el esclarecimiento de los hechos” pidieron desde el escenario. Además se pidió por la derogación del Código de Ordenamiento Urbano que es “el pico demoledor de la ciudad de La Plata”.
También recordaron cuando el intendente Pablo Bruera había asegurado que no iba a renunciar. “Lo único que cumplió Bruera fue no renunciar y lo cumplió” criticaron.
Hicieron una llamado de atención a los subsidios que reparte el municipio “de manera discrecional” y avisaron que desde la gestión municipal “utilizan electoralmente a las víctimas como una forma de intentar dividirnos”.
Antes de la lectura, sobre el escenario la familiar de una víctima de las inundaciones se descompensó y entró en estado de crisis cuando se empezó a leer los nombres de los fallecidos. Si bien se pidió una ambulancia a los agentes de policía que estaban dentro de casa de gobierno mirando custodiando el edificio, el médico nunca llegó y la mujer fue reanimada por los propios asambleístas hasta que pudo reponerse. Sobre el final, el acto -como todos los anteriores- terminó cantando el himno nacional.
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